Estados Unidos

«Se pueden hacer vinos de gran calidad a precios muy razonables»

Gonzalo Antón | Director general del Grupo Artevino

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Tercera generación de una familia dedicada al mundo del vino, Gonzalo Antón se crió entre viñas y barricas. La experiencia de toda una vida dedicada al caldo del dios Baco ahora se traduce en la dirección general del Grupo Artevino, con presencia en las cuatro denominaciones de origen más importantes de España.

-El vino Pruno 2010 de su Finca Villacreces acaba de ser elegido el mejor caldo español por menos de 20 dólares por el crítico Robert Parker. ¿Qué supone un reconocimiento así?

-Implica mucha responsabilidad, tanto para que pueda probarlo el mayor número de personas, como para que la siguiente añada mantenga el nivel de calidad de este año.

-¿En qué se traduce esta distinción?

-Pues en menos de dos semanas se ha agotado toda la producción. Sabíamos que teníamos un gran vino, pero no esperábamos venderlo en tiempo récord.

-¿Eso quiere decir que la relación calidad-precio es fundamental?

-Siempre ha sido clave, pero ahora más que nunca, porque hay mucha oferta a precios muy interesantes y cada vez es más complicado sobresalir. Es imprescindible hacer algo especial, como Pruno 2010, porque su valor y calidad es muy superior a su precio, ya que en España se vende a unos diez euros. Es el mejor ejemplo de que se pueden hacer grandes vinos a precios razonables.

-¿Cómo se logra la excelencia sin llegar a precios desorbitados?

-Trabajamos con estándares de calidad muy elevados, porque es cien por cien roble francés y toda la uva procede de una misma finca que se selecciona a mano, de ahí que la producción sea limitada, ya que no compramos uva fuera. Aunque los costes son muy caros, es posible hacer un buen vino. En este sentido, sacrificar el margen de beneficio es fundamental.

-El 50% se exportará. ¿Qué países se han interesado por un producto así?

-Dentro de Europa destacan Suiza, Alemania y Noruega, aunque donde más botellas se ha comprado es en Estados Unidos, sin olvidar China y Japón. Ya vendíamos en estos países, pero el reconocimiento de Parker ha hecho que la demanda se haya multiplicado por diez y que hayamos entrado en nuevos mercados como Taiwán, Finlandia o Perú.

-Con tanto éxito, ¿aparece la tentación de subir el precio?

-No, porque lo que nos interesa es tener un largo recorrido. Tener un éxito puntual puede ser relativamente sencillo, pero lo importante es mantenerse. Nuestra filosofía es de grupo y los buenos resultados de una bodega o de un vino suman para el triunfo de todos.

-¿Qué retos tiene el vino español?

-Saber transmitir fuera de nuestras fronteras que aquí se hacen buenos vinos y lograr que seamos un referente en caldos con personalidad y muy diversos.