La primera de ellas

Se consumó la primera jornada de huelga en el fútbol femenino español. El parón se hizo oficial con el acta del encuentro entre el Espanyol y el Granadilla de Tenerife, que registró lo sucedido como «retirada o falta colectiva». Ambos equipos se negaron a disputar el encuentro, ejerciendo su derecho a acudir a la huelga convocada por la AFE (Asociación de Futbolistas Españoles) y los sindicatos ON y UGT.

Hace unos días parecía que la situación estaba cerca de desbloquearse. Luis Rubiales, presidente de la Real Federación de Fútbol, reaccionaba ofreciendo una cifra superior al millón de euros. Sin embargo, la cantidad no permite establecer el salario mínimo que pedían las jugadoras, y es aquí donde reside el principal obstáculo para que se firme el ansiado convenio colectivo. «Aunque hasta el Ministerio de Trabajo apoyaba el sueldo mínimo que exigimos (16.000 euros), los clubes dicen que no lo pueden asumir y ahora nadie está dispuesto a hacer esta inyección económica», afirmó Paloma Fernández. La capitana del Espanyol comparecía ante los medios minutos después de la suspensión del encuentro ante el Granadilla. Y se explicó: «Yo sólo he venido para dar un poco la cara y explicar la situación». La jugadora aclaraba que sus peticiones «no sólo afectan a los salarios y la parcialidad –que es donde está el bloqueo– sino que queremos abordar temas como la maternidad, la incapacidad o las vacaciones». También recordó el carácter «indefinido» de este proceso: «La huelga es indefinida. Veremos qué pasa en las próximas horas, pero el fin de semana siguiente se seguiría. Esperamos que durante esta semana se pueda avanzar hacia algún lado».

Aunque el Levante despertó algunas dudas, su encuentro ante el Sporting de Huelva también fue suspendido. El conjunto valenciano mantuvo hasta el último momento el protocolo habitual que sigue en cualquier jornada. Sólo una hora antes del partido reconoció que el encuentro, «con toda probabilidad», no sería disputado. Hoy está fijada la novena jornada de los otros doce equipos que completan la máxima categoría del fútbol español. El Barça lidera la tabla por delante del Atlético.

Las jugadoras, que en los últimos días temían que su protesta se hiciese «invisible», sí contaron con el apoyo de futbolistas como Borja Iglesias, Lucas Pérez o Antoine Griezmann. El delantero francés, a través de su cuenta de Twitter, manifestó su apoyo a sus compañeras: «A todas las integrantes del fútbol femenino que están en huelga luchando por sus derechos, les envío todo mi apoyo. ¡Mucho ánimo!». Además, las categorías formativas también se solidarizaban ayer con las profesionales de la Liga Iberdrola. Varios equipos femeninos de categorías inferiores protagonizaron ayer «sentadas» antes de comenzar sus partidos.