La investigación concluye que el examen de italiano de Luis Suárez fue una farsa

La investigación llevada a cabo en coordinación entre la Guardia di Finanza y la Fiscalía de Perugia ha llegado a la conclusión de que el examen de italiano al que se sometió el futbolista uruguayo Luis Suárez el pasado 17 de septiembre fue una farsa y que el contenido del examen “fue comunicado previamente” al entonces jugador del Barcelona.

En aquella época, Luis Suárez negociaba su fichaje por la Juventus y tramitaba su nacionalidad italiana para facilitar su incorporación al equipo turinés. Para obtener el pasaporte italiano era imprescindible que el actual jugador del Atlético de Madrid superara un examen de tipo ‘B1’ de italiano para demostrar que conocía la lengua.

El examen se realizó en la Universidad para Extranjeros de Perugia y los investigadores sostienen que “se alcanzó una predeterminación del resultado y de la puntuación del examen, para corresponder a las peticiones que había hecho la Juventus, con el fin de lograr un retorno positivo de imagen, tanto personal como para la Universidad”.

En un comunicado del fiscal de Perugia, Raffaele Cantone, se informa de que “tras los registros e incautaciones del 22 de septiembre de 2020, las investigaciones, que continuaron sin interrupción y en estricto cumplimiento del principio de confidencialidad, han corroborado significativamente el marco probatorio que ya se había esbozado en relación con la organización, por parte de los sospechosos, durante una sesión establecida ad personam, de un examen “farsa”, que permitió la expedición del certificado de conocimiento del idioma italiano tipo ‘B1’ al conocido futbolista uruguayo Luis Alberto Suárez Díaz, requisito previo para obtener la ciudadanía. En particular, se comprobó que el contenido de la prueba había sido comunicado de antemano al propio futbolista, llegando a una predeterminación del resultado y de la puntuación del examen, para corresponder a las peticiones hechas por la Juventus, con el fin de lograr un retorno positivo de la imagen, tanto personal como para la Universidad. Las comprobaciones de la investigación también permitieron comprender cómo, en los primeros días de septiembre de 2020, la dirección del club de Turín tomó medidas, incluso a los más altos niveles institucionales, para “acelerar” el reconocimiento de la ciudadanía italiana a Suárez, lo que permitió formular nuevas hipótesis de delitos contra personas distintas de las pertenecientes a la universidad, que todavía se están investigando”.

A petición de la Fiscalía, la Unidad de Policía Económica y Financiera de la Guardia di Finanza de Perugia ha establecido una inhabilitación de ocho meses para el ejercicio de cargos públicos para la rectora Giuliana Greco; el Director General, Simone Olivieri; y los profesores Stefania Spina y Lorenzo Rocca, “por los delitos de revelación del secreto oficial con el fin de obtener un beneficio económico indebido y múltiples falsedades en actos públicos”.

El juez que instruye el caso ha tomado esas medidas cautelares ante “el riesgo concreto y presente de que los sospechosos, si no se les somete a una cautela adecuada, repitan conductas delictivas análogas a las que se investigan en este proceso, habiendo demostrado que consideran que la institución de la que forman parte y que representan es una res privata (una cosa privada) manejable a voluntad”.