Florentino cumple 1.000 partidos como presidente del Real Madrid

El Real Madrid abrió esta semana el proceso electoral tras cumplirse cuatro años de la última reelección de Florentino Pérez. Y todo apunta a que va a volver a ser reelegido al mando del club sin que se celebren elecciones. Pese a que algunos han anunciado que podían presentarse, da la impresión de que son más intentos de darse a conocer para más adelante que para este curso. Así que Florentino Pérez seguirá al mando del club para ver terminada la obra que va a cambiar definitivamente el Bernabéu y para afrontar un verano que puede recordar a aquellos años en los que las figuras del fútbol mundial aterrizaban sí o sí en el estadio madridista. Haaland y Mbappé son los futbolistas de los que todo el mundo habla y sus caminos parecen converger en el Real Madrid de manera inexorable.

Florentino Pérez, de 74 años, va, por tanto, a superar de largo la cifra redonda a la que llegó en el encuentro contra el Eibar. Hizo su partido 1.000 como presidente del club, el segundo que más encuentros ha vivido al mando. Sólo Santiago Bernabéu, con 1.407, le supera. El legado del presidente que da el nombre al estadio es el que siempre defiende Florentino Pérez y que convierte en su máxima: no desfallecer nunca, no sentirse colmado nunca y aspirar siempre a más. Si se consigue una Champions, hay que ir por la siguiente. Así, suma cinco Copas de Europa, a sólo una de Gento y Santiago Bernabéu. Quién sabe si esta es la temporada en la que les empate. Su encuentro 1.001 será contra el Liverpool, el martes.

Las cinco Champions (tres de ellas consecutivas, en un hito histórico) son los títulos que más lucen de los 26 que suma Florentino Pérez (12 nacionales y 14 internacionales). De los 1.000 encuentros en los que ha sido presidente, lleva 657 victorias, 172 empates y sólo 171 derrotas. 2.320 goles a favor y 1.027 goles en contra.

Ha vivido de todo al mando de la institución. Su llegada cambió la concepción del fútbol y después le siguieron los demás clubes. Entendió que había que abrir las fronteras e inventarse nuevos ingresos pues, de otra manera, los clubes morían. Ganó una Champions, varias Ligas. Se marchó y después volvió con la misma fuerza que antes.

Su plan siempre fue lograr la estabilidad económica para conseguir la estabilidad deportiva y han sido estos días la que la han puesto a prueba. En una crisis mundial inédita e inesperada, el famoso cisne negro que nadie espera, el Real Madrid ha mostrado más capacidad que los rivales para hacer frente a la adversidad económica de vivir temporada y media con los estadios cerrados al público.

Terminó el curso pasado con beneficios y asegura que no va a hacer ninguna locura que ponga en peligro el futuro de la entidad, que hay que ganar ahora, pero también pensar a largo plazo.

El futuro está trazado: esta temporada el club persigue dos títulos en el campo, mientras la reforma del estadio se acerca a su tramo final y suenan cada vez más fuerte, los tambores de los grandes fichajes.