Balonmano

España, a cuartos con una derrota ante Francia, pero sin rasguños

El rival en el cruce decisivo será Noruega o Alemania

Imanol Garciandia tuvo un buen arranque de partido ante los franceses
Imanol Garciandia tuvo un buen arranque de partido ante los francesesLukasz GagulskiAgencia EFE

Francia y España estaban ya en cuartos de final y ante un partido en el que no se podían dar componendas extrañas para poder elegir rival en los cruces. Así que el último encuentro de la segunda ronda para los Hispanos era una excusa perfecta para seguir rodándose y llegar con buenas sensaciones al miércoles en cuartos donde esperan Noruega o Alemania. Ganó Francia, pero España cerró la segunda fase sin rasguño alguno.

Cuesta ver en un gran campeonato un España-Francia con ambas selecciones tomándoselo con filosofía. «Nos tenemos que tomar cada partido como una experiencia, porque somos un grupo nuevo que aún está en fase construcción. Todavía necesitamos generar nuestros automatismos y eso se consigue con cada partido y con cada entrenamiento», decía Jordi Ribera antes de medirse a los galos. Se trataba de comprobar quién estaba más minutos centrado. Y España lo estuvo de salida con las paradas de Rodrigo Corrales y los lanzamientos de Imanol Garciandia. Con minutos para todos, con rotaciones generosas, España controló a los campeones olímpicos hasta que llegaron las primeras pérdidas y Francia hizo un amago de escapada (6-9). «Hay que pensar un poquito en todo lo que va a venir a partir de ahora, por lo que habrá que aprovechar el partido para trabajar dentro de la pista, pero también para recuperar a los jugadores», advertía el seleccionador español. Pero es que los «bleus» pensaban lo mismo. Y España se reenganchó de inmediato (9-9).

Con las dos selecciones invictas a estas alturas de campeonato se trataba de revalidar la imagen de consistencia mostrada hasta ahora. Para Francia era el primer partido de serio en la segunda fase (Irán y Montenegro fueron dos entrenamientos suaves) y para España tenía algo más de confirmar lo visto hasta ahora en los partidos ante Polonia y Eslovenia. No se trataba de dejarse el alma, pero sí de evitar un tropiezo que minara la moral para lo que está por venir. España tuvo el partido controlado hasta que llegaron las exclusiones avanzada la segunda parte, ganó protagonismo Vincent Gerard en la portería francesa y hubo una sequía de más de siete minutos que permitió a los galos vivir un final apacible. El miércoles ante Noruega o Alemania, la hora de la verdad.

26. España (13+13): Corrales; Solé (1), Garciandia (3), Sánchez-Migallón (1), Gedeón Guardiola (1), Cañellas (3) y Dani Fernández (7,3p) -equipo inicial- Pérez de Vargas (ps), Maqueda (2), Ángel Fernández (-) , Alex Dujshebaev (2), Figueras (-), Serdio (4), Valera (), Dani Dujshebaev (1) y Odriozola (1)

28. Francia (13+15): Gerard; Lenne (-), Mem (4), Remili (4), Briet (4), Grebille (3) y Fabregas (2) -equipo inicial- Desbonnet (ps), Lagarde (-), Prandi (3), Richardson (-), Tournat (3), Mahé (4, 3p), Luka Karabatic (-), Porte (1) y Nahi (-)

Árbitros: Nachevski y Nikolov (Macedonia). Excluyeron por dos minutos a Sánchez-Migallón (2), Maqueda (2), Cañellas, Luka Karabatic (2) y Briet.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la tercera y última jornada del Grupo I de la segunda fase del Mundial de Polonia y Suecia disputado en el Tauron Arena de Cracovia (Polonia) ante unos 7.000 espectadores.