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Chicago Bulls

La larga espera de Gasol

El ala-pivot español Pau Gasol, de Los Ángeles Lakers, momentos antes del comienzo del partido de pretemporada que su equipo disputó ayer contra los Nuggets de Denver en el Staples Center de Los Angeles, en el que los Nuggets ganaron por 97-88
El ala-pivot español Pau Gasol, de Los Ángeles Lakers, momentos antes del comienzo del partido de pretemporada que su equipo disputó ayer contra los Nuggets de Denver en el Staples Center de Los Angeles, en el que los Nuggets ganaron por 97-88larazon

El 28 de abril, los Lakers caían en la primera ronda de «playoffs» después de perder cuatro partidos seguidos contra San Antonio Spurs. Los tejanos eran una máquina perfecta de hacer baloncesto, mientras los Lakers cerraban una temporada nefasta con claros síntomas de descomposición. Pau Gasol, lastrado por los problemas físicos, las críticas y los incesantes rumores de traspaso, no escapaba al tétrico panorama y nada más sonar la bocina el público del Staples Center le despidió de forma especial. Podía ser su último encuentro vestido de púrpura y oro, y los fans angelinos querían decirle adiós como se merecía.

Pero el domingo, 161 días después de la última vez, Pau volvió a lucir el dorsal 16 de los Lakers en el segundo compromiso de pretemporada y «revitalizado» después de su primer verano sin competición en toda su carrera. «No recuerdo la última vez que no jugué durante las vacaciones, creo que tenía 17 años», asegura el de Sant Boi. Muchas temporadas después, Pau no ha jugado partidos, aunque su periodo estival ha estado muy lejos de ser unas cómodas vacaciones. Consciente de que su cuerpo está «tocado» después de doce temporadas en la NBA, renunció a jugar con la selección y pasó por el quirófano para reparar los tendones de sus dos rodillas. Varias semanas en casa sin poder caminar, con un aparatoso vendaje en las articulaciones y tratamiento de recuperación diario para regresar lo mejor posible: «Sé que nunca volveré a estar al ciento por ciento», decía Gasol, pero sí lo suficiente para seguir siendo competitivo en la mejor liga del mundo. Con Kobe Bryant también en manos de los médicos, Pau parece que va a ser mucho más importante esta temporada en los esquemas de Mike D'Antoni, convencido por fin de que el español es uno de los mejores jugadores de los que dispone. El año pasado se perdió 33 encuentros por culpa de las lesiones y jugó lastrado en muchas ocasiones, pero tampoco le ayudó la llegada del nuevo técnico. Le pedía jugar por fuera y llegó a quitarle la condición de titular indiscutible. Mientras, el equipo lejos de mejorar empeoraba y los pesos pesados pedían más comprensión y protagonismo para Pau.

Ahora, con las rodillas en mejor estado Pau se siente «fresco mental y físicamente» y dispuesto a liderar a los amarillos hasta la vuelta de Bryant. En la primera aparición del catalán, los Lakers cayeron ante Denver (88-97) con 13 puntos, 4 rebotes y 2 asistencias de Pau en casi 23 minutos de juego. «La verdad es que va por delante de lo que esperábamos después de volver de una lesión tan complicada. Estoy realmente sorprendido de su nivel», asegura D'Antoni respecto al estado de forma de Gasol a estas alturas. «Mi objetivo es llegar lo mejor posible al primer partido oficial, ahora me siento algo oxidado después de tanto tiempo fuera y sin disputar partidos. Estoy progresando», reconoce el internacional español, que hasta hace poco no se permitía el «lujo» de saltar en los entrenamientos. Por fin, su larga espera de 161 días, más de cinco meses, ha terminado y el parón parece haber funcionado.

Afronta la temporada NBA a tope de energía y de confianza, con el Mundial de España de 2014 en el horizonte.