Vuelta a España

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Contador: “El objetivo no es el podio”

La Razón
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Alberto asume que es complicado y que lo normal es que no gane la Vuelta, pero no va a dejar de intentarlo

Alberto Contador nunca se rinde. “Ni yo mismo lo tengo claro”, dice cuándo se le plantea cuál va a ser su comportamiento hasta llegar a Madrid. “Voy a ir día a día planteándolo, pero el objetivo que tengo no es el podio. Ganar está difícil. Nairo tiene un equipo potentísimo y hay otros dos corredores que están delante de mí”, asume. “Voy a darlo todo. Cada día hay una historia nueva, pueden pasar mil cosas. Algunas veces puedes salir beneficiado y otras, perjudicado”, afirma.

Todos le miran a él cuando tienen que pasar cosas. Es el único capaz de arriesgar casi todo para ganarlo todo. Por eso reconoce que sin su colaboración, la etapa del domingo en Formigal hubiera sido “mucho más tranquila”.

Pero no es a él al que le toca arriesgar ahora. “El que estará pensando en algo será Froome”, dice. “Si no se inventa algo tiene complicado desbancar a Nairo”, dice. Aunque él ha inspeccionado recientemente la subida de mañana a Mas de la Costa, inédita hasta ahora en la Vuelta. “Va a ser durísima. Se suben casi 3.700 metros con una temperatura de 40 grados. Mañana va a ser un día difícil y las diferencias van a ser mucho mayores que en Peña Cabarga”, asegura.

Hasta el momento, Contador ha ganado todas las Vueltas en las que ha participado. Fue el ganador en 2008, 2012 y 2014. Pero ésta, para él, es una Vuelta diferente. “Estoy yendo a contrapié desde el primer día. Estamos peor de lo que nos hubiera gustado”, dice. “Tuve un mal día en Ézaro, una caída justo antes de los tres finales en alto. A nivel de escaladores tampoco tengo el potencial que tienen otros equipos”, asegura. Pero no se rinde sin intentarlo. “Me planteo dar cada día el máximo El otro día sin conseguir la victoria te quedas con una satisfacción mucho mayor. Es lo que la gente recuerda. Hasta ahora había tenido el cien por cien de efectividad con la Vuelta y parece que se va a quedar en el 75”, dice. Pero advierte a sus rivales: “Todavía queda carrera hasta Madrid. Pueden pasar muchas cosas, pero está realmente difícil”.