Polémicas

Del “Pep Guardiola, hijo de puta” a la bronca en los vestuarios que hizo que acudiera la Policía

Una patada de Felipe a Foden desemboca en una tangana, los gritos del público, los aplausos irónicos del Cholo

La gran pelea final en el Atlético de Madrid - Manchester City
La gran pelea final en el Atlético de Madrid - Manchester CityBallesterosAgencia EFE

Una patada de Felipe a Foden fuera del campo desencadenó la gran bronca en el Wanda. Para empezar, una tángana monumental entre los dos equipos, que seguiría minutos después en el túnel de vestuarios, donde acudió corriendo la Policía. Felipe dio el primer golpe, pero lo que acabó desatando la guerra fue la actitud de Savic, que fue a sacar a Foden del campo, que había ido arrastrándose hacia dentro para ganar tiempo.

Se enzarzaron todos con todos en un barullo monumental que nadie parecía capaz de frenar. Savic agarró del pelo a Grealish y los ánimos se fueron encendiendo aún más hasta que Koke consiguió sacar a Felipe del campo. Y la bronca continuó una vez acabado el partido. Savic y Grealish continuaron con lo suyo. El jugador montenegrino del Atlético se fue a buscar al inglés mientras miembros de ambos equipos trataban de sujetar a los dos. No fue a más, pero por detrás llegaba Vrsaljko completamente fuera de sí, amenazando con dar un cabezazo en la distancia a algún jugador del City, mientras una multitud de gente intentaba evitar que se produjeran incidentes más graves.

Esos empujones en el césped enfurecieron a los aficionados del Atlético. Bueno, eso y las reiteradas pérdidas de tiempo de los futbolistas del Manchester City. Cada vez que un jugador inglés se iba al suelo, Simeone pedía a sus seguidores que aplaudieran. Pura ironía. Lo repitió varias veces. “Muchas veces se nos dice a nosotros que si perdemos tiempo, que si somos el antifútbol, se ha escuchado de todo. Vosotros opinaréis hoy”, decía después Koke.

Jugadores e hinchas tenían muy guardadas las palabras de Guardiola en la ida, en las que dijo que atacar a una defensa de dos líneas de cinco era difícil “ahora, en la prehistoria y dentro del mil años”. Ya fue recibido con una estruendosa pitada cuando anunciaron su nombre por megafonía. Y al final se oyó fuerte en un par de ocasiones durante varios segundos: “Pep Guardiola, hijo de puta”. El técnico se enfadó cuando le recordaron esas palabras: “Sólo dije esto, que cuando un equipo defiende bien atrás es muy difícil. Yo no critiqué”, quiso matizar.

Acabó el encuentro y el Atlético no consiguió marcar. Casi lo logra Correa muy al final. El plan estuvo cerca de salirle al Cholo: aguantar y al final apretar. Los futbolistas rojiblancos se quedaron sobre el verde muchos minutos después de que todo terminara. Miles de seguidores permanecieron en la grada con el bufandeo y el clásico “orgullosos, de nuestros jugadores” u “olé, olé, olé, Cholo Simeone.