Liga de Naciones

Números y opiniones que desmienten la leyenda negra de Morata

El capitán de la selección falló el penalti decisivo en la tanda contra Portugal y vuelven sobre él sensaciones negativas que no se corresponden con su carrera

Spain's Alvaro Morata walks past the trophy after received his second place medal during the Nations League final soccer match between Portugal and Spain at the Allianz Arena in Munich, Germany, Monday, June 9, 2025. (AP Photo/Martin Meissner)
Morata, con su medalla de subcampeón, pasa al lado del trofeo de la Liga de NacionesASSOCIATED PRESSAgencia AP

«Es una posibilidad que en septiembre no esté aquí», reconocía Álvaro Morata después de la derrota de España en la final de la Liga de Naciones contra Portugal. Una historia que suena conocida. Algo parecido dijo después de ganar la Eurocopa el verano pasado, pero entonces era el capitán que levantó el trofeo y ahora es el jugador que falló el penalti decisivo, el único de la tanda que no entró.

Hace un año lideraba junto a Rodri de la celebración de los campeones de Europa. El domingo eran sus compañeros los que trataban de consolarlo. Laporte, que fue invitado, como Ayoze, a ver la final como un miembro más del equipo, lo animaba con un beso. El resto lo abrazaba buscando un consuelo imposible para el capitán.

«No he llorado en el campo. Ganas no me faltaban, pero estaban mi familia y mis hijos en la grada», confesaba el capitán español, que a los 32 años carga con una leyenda negra que no se corresponde con sus números. Morata es el cuarto máximo goleador en la historia de la selección, con 37 tantos en 86 partidos. Sólo David Villa, Raúl y Fernando Torres han marcado más que él con la Roja. Sólo un gol lo separa del «Niño», aunque quizá ya no tenga la oportunidad de marcarlo.

El capitán de la Roja es, además, el quinto jugador que más dinero ha movido en traspasos en el mundo. Sus 208 millones sólo los superan los 220 de Dembélé, los 247 Cristiano, los 370 de Lukaku y los 400 de Neymar.

Morata es el jugador más valorado dentro del vestuario por sus compañeros, por el entrenador y por todos los trabajadores de la Federación, que destacan su atención permanente hacia todo el mundo, siempre pendiente de los demás, siempre educado y siempre dispuesto a la conversación.

«A Álvaro le han acertado el lado. Hay veces que no quiere tirarlos nadie, quienes los tiran hay que ponerlo en valor. Álvaro es un campeón, un referente para nosotros, lamento mucho especialmente que haya sido él, no pasa nada. Yo he sido quien le ha dicho que lo tirara y el responsable soy yo», le defendía el seleccionador, Luis de la Fuente, en la conferencia de prensa posterior al partido.

«Morata dejará un legado importante, y nos daremos cuenta con el tiempo. Ha jugado en grandes equipos y ha ganado títulos, pero además es un gran capitán y un ejemplo para los jóvenes. No sé qué más tiene que hacer para que se reconozca su mérito», decía el seleccionador durante la concentración del pasado mes de noviembre.

A Morata siempre lo han defendido sus entrenadores y, especialmente, los seleccionadores. Pero en la memoria de los aficionados pesan más los errores como el penalti fallado en otra tanda, la de la semifinal de la Eurocopa en 2021 contra Italia. Luis Enrique confesó entonces que el delantero andaba medio lesionado, pero como De la Fuente ahora, valoraba su valentía de querer lanzar y su trabajo para el grupo aunque los goles no llegaran con la frecuencia esperada. Luis Enrique siempre valoraba su trabajo en el campo, su labor de desgaste con las defensas contrarias y la generosidad con sus compañeros. De la Fuente le ha añadido el liderazgo que en tiempos anteriores correspondía a Sergio Ramos o a Busquets. Aunque en el campo ha ido perdiendo protagonismo en los últimos tiempos, después de cambiar en el mercado invernal el Milan por el Galatasaray. En la semifinal contra Francia no jugó y en la final sólo disputó los últimos diez minutos de la prórroga antes de enfrentarse a los penaltis.

La sinceridad, a veces, ha jugado en contra del delantero español. Nunca ha tenido problemas en hablar de la salud mental, lo que le ha hecho ganarse una fama de presunta debilidad que no se corresponde con la realidad. Ha llegado a hablar de depresión, pero mientras la sociedad avanza el fútbol no parece preparado para ciertos debates.

Después de ganar la Eurocopa dio las gracias a Iniesta y a Bojan, dos exfutbolistas que también han reconocido haber atravesado una depresión y que le ayudaron a llegar al campeonato continental liderando a la selección española. «Sin ellos no hubiera estado aquí», dijo. Ahora, con la calentura de la derrota, vuelve a plantearse como entonces la retirada de la selección. «Seguro no hay nada. Depende de muchas cosas. Ahora mismo no es lo que pienso, solo pienso en mis compañeros y en lo que ha pasado hoy. Seguramente mañana será otro día. Las cosas hay que pensarlas con tranquilidad pero claro que es una posibilidad que no esté en septiembre», confiesa.