Atlético de Madrid

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0-0. Empate a nada en el Metropolitano

Sin posibilidades ya de ganar la Liga, Simeone reservó a futbolistas importantes. Ni Atlético ni Betis acertaron con el gol y la jugada más aplaudida de la noche fue la entrada en el campo de Joaquín en la segunda mitad

Fernando Torres
Fernando Torreslarazon

Sin posibilidades ya de ganar la Liga, Simeone reservó a futbolistas importantes. Ni Atlético ni Betis acertaron con el gol y la jugada más aplaudida de la noche fue la entrada en el campo de Joaquín en la segunda mitad.

La Liga ya no existe para el Atlético. Simeone quería llegar a los últimos tres partidos de Liga con posibilidades de disputar el título al Barcelona, pero en la última semana el equipo azulgrana ha ganado la Copa y ha agarrado el trozo de Liga que le faltaba.

Guardar fuerzas

Sin opciones para el título, Simeone prefirió ahorrar esfuerzos inútiles a sus futbolistas más castigados y se guardó a uno por línea para que todos estén dispuestos el jueves contra el Arsenal. Al Atlético no le sobran jugadores y el Cholo ha decidido priorizar la opción de ganar la Liga Europa a la estéril persecución al Barcelona en la que recibirá el mismo premio por ser segundo que por ser tercero. Godín, Koke y Griezmann comenzaron en el banquillo y el uruguayo, el más veterano de todos, ni siquiera disputó un minuto de partido.

Ensayos

Con los jugadores que le quedan sanos, lo único que le sobra al Cholo son centrales y por eso quiso probar a juntar tres en el campo sin desplazar a ninguno al lateral, como acostumbra a hacer Lucas desde la lesión de Filipe Luis. Savic, Giménez y el francés protegían a Oblak con Juanfran adelantado por la derecha y Saúl, por la izquierda. Un ensayo al que renunció Simeone en la segunda mitad. Cuando entró Griezmann en el campo, el Atlético sumó ­un delantero y borró un defensa. Saúl cambió de oficio y de costado y pasó a ser interior derecho.

La llegada de Saúl

Desde el centro del campo, Saúl se permitió aprovechar una de sus mejores cualidades, la llegada al área. Lanzó un zurdazo al larguero y poco después remató un córner de cabeza que se le escapó por muy poco. Fue el mejor arma ofensiva del Atlético en la segunda mitad, aunque la mejor ocasión había sido la de Fernando Torres en la primera mitad. Parecía el «Niño» de siempre, se llevó la pelota con la puntera para salvar la salida de Dani Giménez y cuando levantó la pelota por encima del portero como si hubiera retrocedido diez años en el tiempo y fuera a decidir de nuevo la Eurocopa de Austria, apareció la cabeza de Mandi para despejar la pelota sobre la línea de gol. Torres se marcha, pero está decidido a darlo todo hasta el último minuto de su vida como rojiblanco.

La maldición de los porteros

Hace unas semanas, Adán se operaba de una lesión en el pubis y de dos hernias inguinales. Dani Giménez heredaba la portería y el brazalete, pero ayer también se lesionó y Setién tuvo que hacer debutar en la primera parte a Pedro, guardameta del filial.

Ovación

Joaquín esperaba su oportunidad en el banquillo y cuando saltó al campo en la segunda parte fue ovacionado por todo el estadio. La jugada más aplaudida de la noche.

Ficha técnica:

0 - Atlético de Madrid: Oblak; Juanfran (Vrsaljko, m. 65), Savic, Giménez, Lucas, Saúl; Correa (Griezmann, m. 63), Gabi, Thomas, Vitolo (Koke, m. 63); y Torres.

0 - Real Betis: Dani Giménez (Pedro López, m. 38); Barragán, Mandi, Bartra, Amat, Junior; Javi García; Boudebouz (Joaquín, m. 64), Fabián, Tello (Campbell, m. 82); y Loren.

Árbitro: Martínez Munuera (C. Valenciano). Amonestó a los locales Lucas (m. 91) y Giménez (m. 91) y al visitante Fabián (m. 27).

Incidencias: partido correspondiente a la trigésimo tercera jornada de LaLiga Santander, disputado en el estadio Wanda Metropolitano ante unos 54.594 espectadores.