MotoGP

Lorenzo se queda con la magia de Marc

Jorge Lorenzo hizo lo que nunca había logrado: cuatro victorias consecutivas
Jorge Lorenzo hizo lo que nunca había logrado: cuatro victorias consecutivaslarazon

El piloto español se impone en el G.P. de Cataluña y se coloca a un punto del liderato, en manos de Rossi. Márquez se cayó y ve el título «muy difícil».

Tres carreras fuera del podio y cuatro en lo más alto. Así de «sencillo» es el resumen de la temporada de Lorenzo. Tanto él como su moto hicieron «click» después de Argentina y ha pasado de estar a 29 puntos de Rossi a sumar 100 de una tacada y ver el liderato a uno sólo. El enorme martillo con el que celebró su triunfo en Montmeló es una metáfora perfecta de su dominio en MotoGP. Otra vez ganó de principio a fin, aunque en las últimas vueltas, en lugar de dedicarlas a soltar la mano izquierda y saludar al público en algunas curvas, tuvo que apretar «los dientes y otra cosa», según sus propias palabras, para evitar que Rossi amenazara su póker. Nunca antes había ganado cuatro carreras seguidas, un récord personal que le sirve para estar cerca de culminar su remontada. Rossi aguanta de momento en el liderato y el duelo que se avecina hace salivar a los más apasionados. «Es imposible ganar desde la tercera línea de parrilla cuando Jorge está a este nivel», explicaba el italiano, al que condenó a empezar desde la séptima posición.

Cuando consiguió colocarse segundo, en la cuarta vuelta, ya perdía casi un segundo y medio, que no pudo anular antes de la bandera de cuadros. Tampoco perdió más tiempo Valentino, lo que confirma que su ritmo era igual que el de su compañero. Los dos fueron inalcanzables para el resto, incluido Márquez, que arriesgó y perdió, otra vez. «Salgo con la mentalidad de ganar, no de hacer tercero. No es mi estilo», reflexionaba Marc, que sumó su tercer cero en siete carreras. Está a 69 puntos del liderato y él mismo reconoce que «está muy cuesta arriba. Va a ser muy difícil». Sus rivales siguen sin descartarlo en público, pero tanto Lorenzo como Rossi están programando su futuro para una lucha mano a mano por el campeonato. Márquez ya no habla del título y sí de recuperar el «feeling». En la tercera vuelta entró demasiado pasado en una curva, la moto no derrapó donde él quería y, después de rozar a Lorenzo, se salió de la pista. «Vi el muro muy cerca y me tuve que ir al suelo», explicaba. Ahí, en la grava, se acabó una carrera en la que necesitaba recortar puntos y quería dar una alegría a la afición. Ni una cosa ni la otra. El año pasado celebraba en Barcelona su séptima victoria. Ahora, es a Lorenzo al que le salen las cuentas.