Carlos Alcaraz está siendo noticia por muchos motivos en Roland Garros 2025. Por su juego, por supuesto; por repetir en la final; y también por sus gestos deportivos.

Ante Ben Shelton, en los octavos de final, ya tuvo un detalle que todos valoraron. En una volea, consiguió pasar la bola al otro lado, pero había soltado la raqueta, algo que es ilegal, y rápidamente lo reconoció: “He lanzado la raqueta”, admitió al momento, no dejando lugar a las dudas. Punto para el estadounidense.

En la final contra Jannik Sinner, también hizo esto, sin inmutarse demasiado, con toda naturalidad.

Carlos había perdido un primer set que se fue a la hora de partido, muy igualado, en el que los dos tuvieron oportunidades. En el comienzo del segundo parcial, otro juego equilibrado con servicio del italiano. Metió un primer saque el pelirrojo de San Cándido que cantaron fuera, el murciano se acercó y vio que la pelota había rozado la línea. La pisó y la dio por buena. Punto para Jannik, pues el español jamás hubiera llegado a restar, y ventaja, pues iban 40-40. Con un primer servicio después, el número uno del mundo se llevó el juego.