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Nadal quiere contar hasta once

Rafa puede apuntarse Montecarlo por undécima vez. Las diez finales anteriores las ganó. Nishikori es su rival de hoy

El tenista Rafa Nadal
El tenista Rafa Nadallarazon

Rafa puede apuntarse Montecarlo por undécima vez. Las diez finales anteriores las ganó. Nishikori es su rival de hoy.

La última vez que Kei Nishikori se cruzó en el camino de Nadal fue en el partido por la medalla de bronce en los Juegos de Río. Han pasado casi dos años y a Rafa se le habrá pasado ya el enfado con el japonés por el tiempo que se pasó en el vestuario tratándose de una lesión. A Rafa le cortó el ritmo y perdió sus posibilidades de colgarse el bronce. Hoy tiene la oportunidad de conseguir la revancha, pero su principal objetivo es ganar por undécima vez el torneo de Montecarlo.

El año pasado llegó hasta diez, una hazaña que repitió luego en Roland Garros. Nadie ha ganado tantas veces un mismo torneo y Rafa lo ha conseguido en dos ocasiones. Ayer se quitó de encima al búlgaro Dimitrov en sólo dos sets (6-4 y 6-1) en un partido que duró una hora y 29 minutos. El español se mostró muy seguro en el saque y no tuvo dificultades para superar a su rival, que había renunciado a seguir compitiendo en el cuadro de dobles para centrarse en su enfrentamiento con el actual campeón. Cuando llega la temporada de tierra, Nadal despierta. Y en Montecarlo, aún más. Ha jugado diez finales y ha ganado las diez hasta el momento. En sus doce participaciones sólo ha perdido un partido, en semifinales de 2015 contra Novak Djokovic. El serbio vivía entonces su mejor momento y Rafa, uno de los más bajos. «Cada día es diferente. No pienso en el título, sino en jugar bien», reconoce Rafa, que prefiere sumar victorias sin contar récords. ««Llegar a la final once veces aquí es difícil de imaginar. Y más ganar las once. En nuestro deporte, sin embargo, hay muy poco tiempo para pensar en lo que ha sucedido. Hay que avanzar. Cuando acabe el torneo y me vaya tendré más tiempo para pensarlo», asegura.

Nadal se mostró satisfecho. «He estado sólido. El partido estuvo apretado hasta el empate a cuatro, con muchos juegos equilibrados. Cuando tenía ventaja con 3-1 hice un juego y malo y él volvió al partido. Tuve bastantes oportunidades en el primer set para tener un poco más de ventaja pero no los aproveché», explica. «Cuando juegas contra uno de los mejores jugadores del mundo siempre es difícil. Con 5-4 tuve suerte. Dimitrov cometió dos dobles faltas y falló un golpe de derecha. Me dio la ventaja. En el segundo set tuvo más errores de lo normal. Yo me mantuve fuerte», añadió. Pero Rafa siempre quiere más. «Vamos a pegar unos drives. Directos, lo más cerca posible», decía cuando terminó su partido, con la intención de ir a practicar con su equipo. Es incansable Nadal, que no pierde el tiempo para intentar mejorar. El español se mostraba satisfecho por la victoria. «He ganado a un rival muy difícil, que juega muy duro. Es verdad que sus dobles faltas en el primer set me han ayudado, En el segundo ha cometido más errores», reconoce.

El español comenzó fuerte los dos sets. En el primero comenzó ganando por 3-0, lo que le allanó el camino, aunque después el búlgaro consiguió igualar en el sexto juego (3-3). Con 5-4 a su favor, Nadal necesitó romper de nuevo el servicio de su rival para ganar la primera manga. En la segunda, repitió el 3-0 de comienzo, pero la resistencia de su rival fue menor. Dimitrov sólo consiguió arrancarle un juego.

Después de Australia, Rafa ha descansado. Montecarlo es su primer torneo, hasta llegar allí sus dos partidos en la Davis contra Alemania habían sido su único contacto con la competición. «Físicamente estoy bien, me siento recuperado».