El sablazo fiscal a las matriculaciones hace perder al Gobierno el 16% de la recaudación

Al Gobierno le ha vuelto a salir otro tiro por la culata. Su apuesta por la subida de impuestos en plena crisis sanitaria está pasando factura al consumo en muchos sectores y se ha notado especialmente en el mercado del automóvil. Fuertemente maltratado ya por la pandemia, ha vuelto a sufrir un varapalo en su ventas asociado a la mayor presión impositiva, desde que el Gobierno español -a diferencia de sus homólogos europeos- pusiese en vigor el 1 de enero el nuevo ciclo de homologación europeo WLTP, más exigente y que ha venido acompañado de una subida media del 5% en el precio de los coches. La consecuencia directa ha sido el desplome de las matriculaciones de turismos y todoterrenos, que se hundieron en el primer mes del año un 51% -la segunda mayor caída de la UE tras Rumanía-, para situarse por debajo de las 42.000 unidades, según datos de las asociaciones Anfac, Faconauto y Ganvam.

Y este agujero no se ha debido tanto a la crisis generalizada de las ventas en toda Europa, como por el afán recaudatorio del Ejecutivo, que ha elevado la cuota media que abonaron los vehículos en concepto de impuesto de matriculación en 792 euros, lo que representa un enorme incremento del 48,4% en comparación con los 408 euros contabilizados en el mismo mes del año previo, según datos publicados por la Agencia Tributaria. Pero este incremento ha logrado el efecto contrario al esperado, y ha provocado un importante retroceso en los ingresos públicos por esta tasa, transferida a las comunidades autónomas. La recaudación total por el impuesto de matriculación bajó a 34,33 millones de euros durante el primer mes de 2021, un 16,3% menor en comparación con los 41,02 millones de euros contabilizados un año antes.

A la crisis generalizada de las ventas de automóviles del sector se ha unido este nuevo factor de desequilibrio. Si hasta diciembre se calculaba que un 36% de los vehículos estaba exentos de esta tasa, desde el 1 de enero esta proporción ha disminuido hasta el 7%. Esto se debe a las nuevas mediciones sobre emisión de gases a la atmósfera que penaliza a coches de todas las categorías. Actualmente existen cuatro tramos impositivos en esta tasa de matriculación. Los vehículos que emitan hasta 120 gramos de C02 por kilómetro, incluidos naturalmente los etiquetados Eco y Cero, están exentos del pago. Los que emitan entre 121 y 159 gramos, pagan el 4,75% sobre el precio de compra. Las emisiones entre 160 y 199, cotizan al 9,75%. Y por encima de 200, el tipo sube hasta el 14,75%. Con estas nuevas mediciones, comprarse un coche este año sale mucho más caro.

En enero, los compradores abonaron 20.026 euros de media en la adquisición de su vehículo -incluyendo la tasa de matriculación-, lo que representa la subida media del 5%, lo que se traduce en más de 1.000 euros respecto al año pasado. En total, los vehículos matriculados en España el mes pasado contaban con un valor de la base imponible de 833,34 millones de euros, un 55% de descenso respecto a los datos del mismo mes del ejercicio precedente.

Aún así, el número de vehículos total -que incluye los que pagan el impuesto y a los que están exentos- ha caído a más de la mitad (el 56,88 %) en enero respecto al mismo del año pasado, pasando de 100.494 a 43.327. De los vehículos que se matricularon en enero de 2020, un 67,9 % (68.277), estuvieron exentos de pagar el impuesto, al arrojar la medición unas emisiones iguales o menores a los 120 gramos por kilómetro, mientras que en el primer mes de 2021 han sido sólo 15.402 vehículos, 52.875 menos, los que han quedado exentos de pagar el impuesto, el 35,5 % del total.

Con la reducción del número de vehículos exentos del impuesto, se ha incrementado el porcentaje de los que pagan un impuesto de matriculación del 4,75% en la península y el 3,75% en Canarias -los que tienen emisiones de más de 120 gramos/kilómetro y menores a 160-. Estos han pasado de suponer el 26,9% en enero de 2020 al 54,5% en el mismo mes de este año, pese al descenso en la cifra absoluta de vehículos a los que se aplican estos tipos, que ha caído de 27.029 en enero de 2020 a 23.599 en el mismo mes de 2021, unos 3.000 menos. También ha subido el porcentaje de los que pagan un impuesto del 9,75% en la península y del 8,75% en Canarias -los que tienen emisiones iguales o mayores a 160 gramos/kilómetro y menores a 200 gramos/kilómetro-, que ha pasado del 3,6% del total al 6,8%, a pesar de producirse también una caída en el número total de estos vehículos, que han pasado de 3.587 en ene