Ryanair pone fin al ERTE de sus pilotos en España

Ryanair ha decidido poner fin al expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que afectaba a sus pilotos de las bases españolas, y que se venía ejecutando desde que comenzó la pandemia, según ha informado en un comunicado el Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla). Desde el comienzo de la crisis sanitaria provocada por el Covid-19, los pilotos de Ryanair han estado trabajando con una reducción de su actividad laboral de entre el 50% y el 20% con respecto a las cifras habituales.

De esta manera, con la decisión de la aerolínea, todos ellos volverán al 100% tanto de sus jornadas laborales y como de sus salarios, aunque rebajados, ya que los pilotos accedieron a reducirse los sueldos hace un año para ayudar a la compañía a afrontar la crisis. En un principio, Ryanair había intentado cubrir las rutas que tenía operativas de cara a la temporada de verano con plantilla extranjera, en lugar de hacerlo con los pilotos que tenía en España afectados por el ERTE. Sin embargo, Sepla ha explicado que estas rutas nuevas implicaban una recuperación total de la actividad habitual de Ryanair. Por tanto, la presión ejercida por Sepla y por todo el colectivo de pilotos han forzado a la aerolínea irlandesa a rectificar.

Los pilotos se unen así a los tripulantes de cabina (TCP) que ya salieron del ERTE. Ryanair es la segunda aerolínea que termina un expediente temporal en España para volver a su situación habitual, después de que, hace pocas semanas, EasyJet anunciara la suspensión de este mecanismo, a la vez que abría una nueva base en Málaga. Se trata de dos aerolíneas extranjeras, de carácter transnacional, que “apuestan de manera decidida por el mercado aéreo español”, ha agregado el sindicato de tripulantes de cabina Sitcpla.

Los TCP dijeron adiós al ERTE el pasado día 10, ante un paulatino incremento de la producción de la aerolínea, según Sitcpla. Además, la aerolínea de bajo coste irlandesa está formando y contratando a nuevos tripulantes, por lo que fuentes del sindicato calculan que la plantilla tendrá pronto una dimensión similar a la de antes de la pandemia (unos 1.200 TCP) y que se ha reducido en estos meses debido, entre otros motivos, a salidas voluntarias de algunos trabajadores.