La contención del precio de la luz frena el despegue de los precios industriales

El encarecimiento del coste energético así como de las materias primas fueron dos factores determinantes que llevaron a los precios industriales a dispararse un 47% en marzo, lo que supuso su mayor alza en 46 años. No obstante, el abaratamiento de la producción, transporte y distribución de energía eléctrica parece haber frenado esta tendencia, ya que la tasa anual del Índice de Precios Industriales (IPRI) en el mes de abril se ha situado en el 45%, reduciéndose dos puntos, sumando ya 16 meses consecutivos de incrementos.

Tanto es así, que la energía ha sido el único sector industrial que ha tenido una influencia negativa en este porcentaje, ya que este ha disminuido su tasa más de 17 puntos, hasta situarse en el 119%, debido a la reducción de sus costes de producción entre otros. No obstante, los bienes intermedios fueron decisivos para registrar esta cifra ya que se incrementaron casi tres puntos, con una variación del 25,6% a consecuencia de subidas en los precios de la fabricación de productos para la alimentación animal y, en menor medida, de la fabricación de productos básicos de hierro, acero y ferroaleaciones, mayores que el año pasado.

Otro mercado determinante en la escalada de los precios industriales fue el de bienes de consumo no duradero, cuya tasa se incrementó más de un punto y medio por encima de la del mes anterior, situándose en el 10,2%. Destaca en esta evolución el incremento de los precios del procesado y conservación de carne y elaboración de productos cárnicos, más en marzo de 2022 que el año anterior.

En lo que respecta a la tasa mensual, los precios industriales se situaron en el 1,6%, más de cinco puntos por debajo de lo que aumentaron en marzo (+6,7%) y con el alza de abril, se encadenan 14 meses de repuntes mensuales consecutivos. El avance mensual de abril se debe principalmente al incremento de los bienes intermedios así como los bienes de consumo no duradero, los cuáles han presentado una variación del 4,1% y 2,3% respectivamente. Sin embargo, la bajada en los precios de la producción, transporte y distribución de energía eléctrica han sido factores determinantes en la bajada de la energía, ya que ha sido el único sector con repercusión mensual negativa situando su variación en el -0,6%, según la información aportada por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Sin tener en cuenta la energía, los precios industriales avanzan casi dos puntos, hasta el 15,6%, y se sitúa casi 29 puntos por debajo de la del IPRI general, lo que supone la tasa más elevada desde abril de 1980.

Por actividades, los mayores repuntes de precios en comparación con abril de 2021 se dieron en el suministro de electricidad y gas (+128,3%); las coquerías y el refino de petróleo (+101%); la metalurgia (+45,9%) y las industrias extractivas (+45%).

Por comunidades autónomas se observa que este indicador en su tasa anual disminuyó en abril respecto a marzo en trece autonomías, aumentando en las cuatro restantes. Las mayores caídas se registraron en Canarias, Baleares y Asturias, con bajadas de 32,6, 29 y 28,6 puntos respectivamente . Por su parte, Cataluña, Cantabria y País Vasco han sido las comunidades donde más se han incrementado sus tasas, con subidas de 2,3, 2,2 y 2,1 puntos respectivamente. Al finalizar abril, todas las comunidades presentaban tasas positivas de precios industriales. Las tasas anuales más elevadas se dieron en Asturias (+90,9%), Baleares (+83,5%) y Canarias (+80,3%), mientras que las más moderadas correspondieron a La Rioja (+23%), Navarra (+27,6%) y Cataluña (+28,9%).