Agricultura

El aceite de oliva virgen extra supera ya los seis euros por kilo en origen

El de la paja supera los 100 euros por tonelada por la sequía

Olivos con aceitunas en una finca
La producción de aceitunas no va a ser buenaATIENZAAgencia EFE

Suma y sigue. Otra semana más hay que insistir en la subida de los precios en origen del aceite de oliva y de la paja. En el caso del primero de ellos la categoría virgen extra ha superado ya, en algunos casos con creces, la barrera psicológica de los 6 euros por kilo (6.000 euros por tonelada), tras los importantes incrementos que se registraron durante los últimos siete días, que fueron los más importantes del año, y a pesar de que no abundaron las operaciones en el mercado. Por otro lado, la diferencia que hay entre los precios del virgen extra y de los lampantes no es muy importante, según coinciden fuentes del sector. Estos últimos han llegado a pagarse ya hasta a 5.850 euros por tonelada, con un incremento semanal de 550 euros, lo que supone un 10 por ciento en tan solo siete días, según Oleoestepa

El motivo fundamental que ha provocado este «subidón» han sido las malas perspectivas de cosecha de aceituna y de producción de aceite de cara a la próxima campaña de comercialización, que comenzará el 1 de octubre. Las desfavorables condiciones climatológicas registradas en marzo y abril, con la suma de la sequía y las elevadas temperaturas, han provocado daños importantes, en muchos casos irreversibles, en la floración y en el cuajado de la aceituna. En las provincias andaluzas, en las que este sector es clave, han constatado ya los daños. Fuentes del mismo aseguran que nos vamos a encontrar con una segunda campaña consecutiva muy mala, en la que la producción será inferior incluso a la de la actual, con cifras totales inferiores a las 650.000 toneladas.

La sequía también va a reducir la cosecha de cereales de otoño- invierno, algo que se ha podido comprobar ya a pie de parcela en las provincias andaluzas, en las que se ha comenzado a segar. Los rendimientos de esas parcelas en las que han entrado las máquinas han caído en picado en relación con los que se consideran normales. A este hecho, el de la baja cosecha de cereales que se espera, hay que añadir otro fenómeno importante y muy grave, como será la reducción de la producción de paja, ya que las plantas no se han desarrollado y se han quedado a un palmo del suelo. Ello ha provocado que los precios de esta mercancía se hayan disparado en el último mes. Especialmente acusada fue la subida registrada la semana pasada, en la que se llegaron a los 100 euros por tonelada en origen en Salamanca y Toledo, cifras que no se habían alcanzado nunca. La paja es un alimento fundamental para varias especies ganaderas y también un instrumento clave para el bienestar animal ya que se utiliza como cama.