Transporte

Los aeropuertos españoles operan "con normalidad" pese al cibertataque a la red europea

Los aeropuertos de Bruselas Heathrow, los más afectados

Cientos de pasajeros hacen cola en los controles de seguridad del aeropuerto londinense de Heathrow
Cientos de pasajeros hacen cola en los controles de seguridad del aeropuerto londinense de HeathrowFrank AugsteinAgencia AP

Los aeropuertos españoles de la red de Aena están operando "con normalidad" y no se han visto afectados por las incidencias como ciberataques que han sufrido los europeos de Bruselas (Bélgica) y Berlín (Alemania) o un "problema técnico", el londinense de Heathrow.

Los aeropuertos funcionan "con normalidad" en España, han asegurado este sábado a EFE fuentes de Aena.

El aeropuerto de Bruselas se vio afectado la pasada noche del viernes por un ciberataque contra su proveedor de servicios de facturación y embarque que persistía durante la mañana del sábado, según informó la entidad aeroportuaria de la capital belga.

A consecuencia de la incidencia, que supuso que las operaciones de facturación y embarque tuvieran que hacerse de manera manual, se cancelaron nueve vuelos y otros quince sufrieron retrasos de una hora o más, según informó el propio aeropuerto a la prensa local. El aeropuerto preveía este sábado la salida de 35.000 pasajeros.

"El proveedor de servicios está trabajando activamente en una solución y está intentando resolver el problema lo antes posible", declaró a medios belgas la portavoz Ihsane Chioua Lekhli.

De ese modo, aconsejó a los pasajeros con vuelo este sábado 20 de septiembre que verifiquen el estado de su vuelo con su aerolínea antes de desplazarse al aeropuerto y sólo acudir si está confirmado.

El aeropuerto londinense de Heathrow, el mayor de Europa, también informó este sábado que su proveedor de facturación y embarque experimenta un "problema técnico" que podría causar demoras a los pasajeros de salida.

Por otro lado, el aeropuerto de Berlín-Brandeburgo, en Alemania, también se vio afectado por un ciberataque el viernes por la noche que generó tiempos de espera más largos en la facturación y el embarque, así como retrasos.