Banca

Deutsche Bank expedienta a doce empleados por la venta de derivados de riesgo en Madrid y Londres

La entidad bancaria anuncia "medidas apropiadas" tras los fallos detectados

Un hombre abre un paraguas ante una sucursal de Deutsche Bank
Un hombre abre un paraguas ante una sucursal de Deutsche BankLuke MacGregorREUTERS

Una investigación interna de Deutsche Bank impulsada por el propio banco sobre la venta abusiva de derivados de divisas de riesgo en España ha revelado que algunos empleados de la oficina de Madrid y de la mesa de derivados de Londres actuaron "con falta de sinceridad", aprovecharon "fallos en los controles del banco" e "infringieron las normas de la Unión Europea" en su beneficio. Por ello, la entidad revisará todas sus actividades de venta de derivados y tomará "medidas apropiadas" contra doce de sus operadores tras los fallos detectados, que asumirán medidas disciplinarias.

Según ha desvelado el diario económico Financial Times, estos empleados forzaron a muchos de sus clientes -principalmente pequeñas y medianas empresas españolas- a comprar productos financieros muy complejos derivados de divisas que se promocionaban como seguros y baratos, pero que exponían a los clientes a "grandes riesgos" y que generaban a Deutsche Bank "grandes beneficios".

No es la primera vez que el banco alemán tiene problemas con la comercialización de estos productos. Una investigación, denominada por la propia entidad alemana como Proyecto Teal, se inició cuando varias empresas –principalmente españolas– comenzaron a denunciar haber sido víctimas de este tipo de operaciones con productos derivados por parte de Deutsche Bank, cuyos agentes habrían comercializado sin proporcionar la debida información, causando graves pérdidas a estas empresas, tras ignorar las medidas de control y prevención que la entidad debería haber implementado, tal como le exige la normativa. La entidad fue demandada por Palladium Hoteles por un agujero de 500 millones debido a inversiones en derivados de divisas, y bodegas García Carrión recibió una indemnización de 10 millones de euros con la que se evitó una demanda en los tribunales. Se calcula que las empresas afectadas podrían ascender a 50.

Fuentes de la entidad explicaron a LA RAZÓN que "estamos revisando partes de nuestras actividades de venta de derivados de FX estructurados y hemos tomado las medidas apropiadas. Como nosotros y nuestros reguladores esperaríamos, estamos mejorando nuestros procesos y aumentando nuestros controles", aunque desestimaron ampliar más la información por tener dicha información en curso.