Ryanair gana 2.190 millones en los nueve primeros meses de su año fiscal, pero recorta sus previsiones para el ejercicio

Ryanair, la aerolínea líder por pasajeros en España, cerró los primeros nueve meses de su ejercicio fiscal con un incremento de su beneficio del 39%, hasta los 2.190 millones de euros, según ha informado hoy.

A pesar de este notable incremento de su rendimiento, la compañía sufrió un notable frenazo de su beneficio en el tercer trimestre del año al ganar apenas 15 millones de euros frente a los 211 millones que logró en el mismo periodo de su ejercicio anterior. Un retroceso que ha atribuido al importante incremento de los precios de los combustibles que no ha podido contrarrestar con el incremento de sus ingresos, según ha detallado el grupo que dirige Michael O'Leary. De hecho, Ryanair ha rebajado su previsión de beneficios para el conjunto del ejercicio desde una horquilla de entre 1.850 y 2.050 millones de euros a entre 1.850 y 1.950 millones. La compañía ha explicado que esta previsión y el resultado de todo el año "dependen en gran medida de que se eviten acontecimientos adversos imprevistos en el cuarto trimestre, como la guerra de Ucrania, el conflicto entre Israel y Hamás, y nuevos retrasos en las entregas de Boeing".

Beneficio récord

Sus estimaciones más conservadoras aún permitirían igualmente a Ryanair lograr unos beneficios récord y superar el máximo de 1.450 millones de euros que alcanzó en 2018, antes de la pandemia.

En sus nueve primeros meses de año fiscal, los ingresos de Ryanair se incrementaron un 26%, hasta los 11.270 millones de euros; mientras que sus gastos lo hicieron en casi igual proporción, un 25%, hasta los 8.880 millones de euros.

La aerolínea ha informado de que su tráfico creció un 7% en su tercer trimestre fiscal, hasta los 41,4 millones de pasajeros, con un factor de carga, que mide el porcentaje de asientos ocupados en cada vuelo, del 92%. Las tarifas medias de la compañía subieron un 13%, por encima de los 42 euros, gracias al "buen comportamiento de los vuelos a mitad de octubre y a los picos de viajes en Navidad y Año Nuevo". La compañía ha explicado que la carga y las tarifas fueron más bajas de lo previsto debido a la "repentina retirada de los vuelos de Ryanair de muchas OTA piratas a principios de diciembre".