Macroeconomía

Sánchez dilapida la recuperación económica: el PIB se frena y el déficit se desvía

Desde que el líder socialista tomó el poder se han perdido tres décimas acumuladas de previsión de crecimiento del PIB, se ha disparado el gasto (1.300 millones sólo en los «viernes sociales») y el déficit se desviará en 10.000 millones.

El informe del BBVA constata un menor gasto del esperado en vivienda. Foto: Alberto R. Roldán
El informe del BBVA constata un menor gasto del esperado en vivienda. Foto: Alberto R. Roldánlarazon

Desde que el líder socialista tomó el poder se han perdido tres décimas acumuladas de previsión de crecimiento del PIB, se ha disparado el gasto (1.300 millones sólo en los «viernes sociales») y el déficit se desviará en 10.000 millones.

La economía española pierde gas. Mientras, como en anteriores gobiernos socialistas, se disparan los impuestos y el gasto del Estado, ajeno a la incertidumbre. Los vientos de cola siguen soplando como antes, incluso con mayor fuerza, toda vez que la eurozona está estabilizada, con la previsión del precio medio del barril de petróleo en torno a los 60 dólares a cierre de año –por debajo de los 71 dólares de 2018– y con el Banco Central Europeo anunciando el retraso de la normalización monetaria, lo que mantendrá el grifo abierto de los tipos de interés bajos. Sin embargo, todos los indicadores apuntan a una desaceleración más acusada de lo esperado. La incertidumbre política doméstica y global, y las medidas adoptadas por el Gobierno de Sánchez están restando décimas al crecimiento de España en cada previsión.

La última, la que presentó ayer BBVA Research, que augura un crecimiento para este año inferior a su anterior previsión. En concreto, la economía española avanzará un 2,2%, dos décimas menos. La evolución de la economía sigue siendo a la baja en 2020, cuando el crecimiento caerá al 1,9%, una décima por debajo de lo pronosticado por la entidad en su anterior análisis.

En conjunto, desde la última previsión de crecimiento realizada por el Gobierno de Rajoy para 2018 (2,7% y ese año se cerró en el 2,6%), Sánchez se ha dejado tres décimas por el camino: 3.600 millones. Mientras, se dispara el gasto –1.300 millones sólo en los llamados «viernes sociales»– y el déficit se desviará en 10.000 millones de euros.

Los responsables del menor empuje son, por este orden, las políticas económicas y fiscales puestas en marcha por el Ejecutivo, como la subida del Salario Mínimo Interprofesional a los 900 euros, que resta tres décimas a la creación de empleo en los colectivos más vulnerables, y la incertidumbre global por el proteccionismo y la guerra comercial entre EE UU y China, que comienza a golpear a Europa.

El informe achaca a la situación doméstica una de las décimas que se pierden en 2019. La otra, al menor crecimiento de la eurozona. Por partes, según BBVA Research, la política fiscal puede volverse contractiva al final de año. Así pues, el efecto a corto plazo de la subida de salarios y de la creación de empleo público se difumina. Respecto a la subida del SMI, tras tres meses en vigor, la temprana evaluación del impacto es, por ahora, negativa para la economía, a la espera de una mejora de la productividad que logre equilibrar esta subida salarial, según indicaron los responsables del estudio.

En este contexto, las estimaciones de la entidad afirman que en 2019 el crecimiento del empleo podría ser entre 0,1 puntos porcentuales y 0,4 puntos inferior al aumento del mercado laboral que se habría registrado de no haberse subido el SMI.

El crecimiento previsto del 2,2% se sustenta de nuevo en la evolución del consumo, tanto privado como público, y en la inversión en construcción e inmobiliaria. Por el contrario, el comportamiento de las exportaciones de bienes, la inversión en vivienda y en bienes de equipo, muy ligada a la previsión a largo plazo, están por debajo de lo esperado en el anterior informe.

De cumplirse este escenario, los salarios se incrementarán por encima de la inflación y la tasa de paro se reduciría al 12% en 2020, después de haberse generado 630.000 puestos de trabajo en los últimos dos ejercicios, algo más de 300.000 por año, cuando sólo en 2018 se crearon 566.000. La subida del 22% del SMI es una incógnita aún para todos los análisis, desde el Banco de España, la Autoridad Fiscal, la Comisión Europea o BBVA Research, pero todos ellos auguran una caída del empleo en los colectivos más golpeados por el paro y una reducción de las horas trabajadas. Hasta 195.000 empleos podrían dejar de crearse en dos años, según la entidad financiera, por la subida salarial.

Corrección de las cuentas

BBVA Research también rebajó la previsión de inflación hasta el 1,1% en 2019 y estima que el déficit público se reduzca en los próximos dos años, tanto por la reducción de las prestaciones por desempleo como por la menor carga de intereses derivada de las condiciones favorables de financiación. El déficit del conjunto de las administraciones públicas se reducirá cuatro décimas hasta el 2,2% en 2019, «situándose nuevamente por encima del objetivo de estabilidad».

Para 2020, en un escenario sin cambios en la actual política fiscal, se espera una nueva corrección de las cuentas del Estado hasta el 1,9% del PIB, lo que supondrá una nueva desviación sobre el objetivo de estabilidad (-0,5%). De hecho, el servicio de estudios de la entidad financiera augura una deuda pública del 82,7% del PIB este año y del 81,1% del PIB el próximo.