CEOE

Trabajo investigará si Garamendi fue falso autónomo durante cuatro años

«Lo vamos a mirar», dice Yolanda Díaz. El presidente de la CEOE aprovecha la regularización de su contrato para subirse el sueldo 30.000 euros y ganará 380.000 al año

La polémica vuelve a salpicar al presidente de la CEOE, Antonio Garamendi. Con la paz firmada con sus opositores internos y centrado en su ruptura institucional con Yolanda Díaz tras su «traición» con lo firmado en la reforma laboral, el presidente se ha situado de nuevo en el ojo del huracán tras conocerse su nueva situación contractual dentro de la organización empresarial: ha dejado de ser autónomo para firmar un contrato de alta dirección. Así, Garamendi se integrará en la plantilla como asalariado, con un sueldo bruto fijo de 380.000 euros, 30.000 euros más que los 350.000 euros que ingresaba durante su anterior presidencia, por lo que la patronal asumirá en esta regularización los 50.000 euros en concepto de variables que tenía hasta ahora.

Eso significaría que sus emolumentos habrían engordado un 8,5%, lo mismo que el Gobierno aprobó para las pensiones y el salario mínimo, pero más del doble de lo que lo ha hecho para los funcionarios y muy por encima de los convenios sectoriales que se están firmando en la actualidad, cuya media está en torno al 3,5%. En concreto, el máximo mandatario de los empresarios pasará a cobrar más de 27.000 euros al mes brutos en 14 pagas. De esta manera, su subida salarial será tres veces superior a la de sus propios empleados, que será del 3% este año.

Fuentes patronales han confirmado esta subida, pero con matices, ya que el incremento del 8,5% corresponde a la actualización salarial de los dos últimos ejercicios, cuyos incrementos aún estaban pendientes y se le han hecho efectivas ahora –el 3,5% correspondiente al pasado año más el 0,8% de 2021, que unido al 3% de 2023 sería un 7,8% total, aunque a efectos reales sería del citado 8,5%–.

Según fuentes internas de la patronal, el objetivo no ha sido otro que solucionar las posible irregularidades que pudieran relacionarse con la situación de autónomo y actualizarlo «en base a la legislación actual», para darle de alta en el Régimen General de la Seguridad Social «aplicable a los asimilados a trabajadores por cuenta ajena», según consta en el acta de la reunión, que justifica la decisión «dado que las funciones que ejerce el presidente son comparables con las que de forma habitual ejercen los consejeros delegados o presidentes ejecutivos de sociedades mercantiles».

Según ha podido saber LA RAZÓN, el contrato debería haberse hecho efectivo desde el pasado 1 de febrero, pero «todavía quedan unos flecos por solventar, pero que no supondrán ningún problema» para la próxima junta.

Fue la comisión de régimen presupuestario, presidida por Alejandra Kindelán –presidenta de la AEB–, la que propuso este cambio para evitar «problemas» relacionados con la nueva reforma laboral, que firmó la propia CEOE hace ya más de un año, dado el alto importe de su sueldo y las altas responsabilidades asumidas, como apuntó un informe jurídico interno.

Aunque fuentes de la Inspección no han confirmado que hubiera una investigación en curso, sí que han incidido en que «siempre estamos vigilantes con este tipo de situaciones anómalas», sobre todo respecto al cumplimiento con las cotizaciones correspondientes, ya que en el caso del presidente de la CEOE podría ser «irregular» si hubiera cotizado de menos al ser autónomo, algo que niegan fuentes patronales: «El presidente siempre ha cotizado por las bases máximas». También recuerdan desde la Inspección que justificar un sueldo tan alto con emisión de facturas es «complicado» porque se podría incurrir en una situación de falso autónomo, que le hubiera permitido «facturar más con menor cotización». Todo ello no supondría la apertura de un expediente grave, sino que podría quedarse en una infracción administrativa. Aún así, demostrar una situación de falso autónomo sería muy «complicado» en su caso, al disfrutar de otros ingresos profesionales.

Pese a ello, la propia ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, confirmó ayer ante los periodistas que investigará la situación laboral de Garamendi durante los últimos cuatro años por si hubiera alguna situación irregular. «Por supuesto que vamos a mirar» si se encuentra dentro del marco legal y si es necesaria una intervención de la Inspección de Trabajo.