Tecnologías de la Información

Big Data: la capacidad para transformar la educación

El almacenamiento y procesamiento de datos es una de las tecnologías con mayor capacidad de la economía digital

El «mundo feliz» del algoritmo
El «mundo feliz» del algoritmolarazon

Los seres humanos nos desenvolvemos y estamos adaptados a la vida gracias a la luz. Nuestros ojos no son capaces de ver con claridad en la oscuridad y nuestros movimientos son torpes y temerosos cuando nos encontramos a tientas. Estamos evolucionados para desarrollarnos en ambientes seguros, predecibles y controlables. Llevando este símil al ámbito tecnológico que envuelve la educación hoy día, el Big Data tiene la potencialidad de poner luz en aquello que estuvo oscuro: darnos información sobre elementos críticos y esenciales del proceso de formación de los estudiantes para entender así su evolución y crecimiento, y ofrecer una mayor customización en función a diversas necesidades y capacidades de cada alumno. Es hora de matar la estandarización universitaria.

El almacenamiento y procesamiento de datos es una de las tecnologías con mayor capacidad de la economía digital. Sus aplicaciones son prácticamente infinitas en el ámbito de la prospección y estudio de mercados. Las grandes compañías de publicidad y venta masiva, como Google y Amazon, desarrollan algoritmos complejos para analizar las preferencias de sus clientes a través de los datos que generan y ofrecer soluciones anticipándose incluso a nuestras propias decisiones.

La pregunta es, si la tecnología ya es capaz de adaptar nuestras experiencias y de adelantarse a nuestras necesidades, ¿por qué no puede hacer lo mismo en el entorno educativo?

Resulta paradójico que en nuestro país exista una fiebre colectiva por digitalizar los modelos de negocio y poco interés en reinventar los modelos de aprendizaje. El último informe Adopción e impacto del Big Data y Advanced Analytics en España es concluyente. Según el estudio, llevado a cabo por Esade, solamente el 4% de la inversión privada destinada a Big Data está relacionada con la gestión del talento y recursos humanos. Actualmente, “el desarrollo de una cultura más analítica e innovadora” solamente preocupa al 38% de organizaciones que implementan técnicas de Big Data y Advanced Analytics a nivel global.

Hay experiencias muy significativas en este campo de adaptación del Big Data en combinación con el Learning Analytics a la educación. En Arizona (EEUU), una universidad ha implementado como medio de estudio un software de recolección y análisis de datos masivos que va adaptando los diferentes programas formativos, el ritmo de avance, los contenidos y trabajos a las necesidades de sus alumnos, analizadas automáticamente a partir de los resultados académicos de éstos.

Este programa permite a los docentes tener una visión más completa y segmentada del proceso formativo para detectar cualquier incidencia que sufra alguno de sus alumnos, desde un retraso en el ritmo de aprendizaje, a la necesidad de reordenar o completar los programas por detectar un bloqueo generalizado en algún punto de éstos. Actualmente las instituciones educativas tienen en su poder una tecnología que antes del Big Data era inaccesible para mejorar los resultados del aprendizaje. De hecho, esta experiencia ha sido un éxito desde su primer año, en el que se consiguió reducir la tasa de abandono en un 54% y aumentar la tasa de éxito en sus estudios en un 13%.

Hipercustomización

Podemos prever, dados los resultados, que la palabra dominante en el sector de la formación superior, de aquí al futuro, no puede (ni debe) ser estandarización sino hipercustomización.
Cada alumno, cada proceso formativo, es acreedor de un ritmo educativo concreto, de unas dificultades y habilidades individuales, y de unas estrategias de estudio particulares. Todo esto le lleva a recorrer caminos diferentes para llegar a una meta similar. Esos caminos, con las posibilidades del Big Data, quedan perfectamente iluminados a la vista de los docentes. Hoy se puede guiar a cada estudiante por su propio itinerario, adaptándolo a sus necesidades, aumentando sus posibilidades de éxito y reduciendo las tasas de abandono.