Panorama desolador en Neda (A Coruña). Las intensas lluvias han motivado que varias viviendas de la zona de Santa María se vieran inundadas tras la rotura de un muro en uno de los laterales del río Besteiro, donde el Belelle también se desbordó.

Jorge López, un vecino de esta zona, ha asegurado que el agua alcanzó "hasta un metro y medio" en su vivienda y que han perdido "absolutamente todo".

Así, ha detallado que "tanto caudal que traía el río, rompió un muro y canalizó directamente" el agua hacia su casa, "rompió el portal, cruzó la carretera general, saltó para la casa y fue como un tsunami de repente".

López ha afirmado que empezó a subir agua, "10 centímetros, 15, 20... y cuando nos dimos cuenta teníamos metro y medio".

Este residente en Neda detalla que la fuerza del agua, una vez en la vivienda, "llevó todo, platos, tenedores, vasos, electrodomésticos, nevera, congelador... Todo lo que tenía".

Además, también tiene afectados "camas y muebles". "A día de hoy, todo lo que habíamos trabajado mi mujer y yo, nos quedamos sin nada", a lo que ha añadido que el agua se llevó también su cartera.

Las fuertes lluvias registradas en la última jornada han dejado más de doscientas incidencias en Galicia, cincuenta de ellas durante la noche.

La mayor parte de las intervenciones del 112 estuvieron relacionadas con inundaciones en calles, carreteras, viviendas, bajos y garajes, así como con árboles caídos y desprendimientos de tierras y piedras.

La Xunta mantiene activo el Plan de Protección Civil Inungal ante la posibilidad de desbordamientos, como ha ocurrido en Neda. Hay seis ríos que se encuentran bajo vigilancia por riesgo de desbordamiento. Son Rego das Mestas (Valdoviño), Mandeo (Aranga), Castro (Cee), Dubra-Tambre (Val do Dubra), Barcala-Tambre (Negreira) y el Oitavén (Soutomaior).