Juicio a Trapero

De los Cobos: si los Mossos hubiesen dado un “ultimátum” a Puigdemont, el 1-O “no habría salido adelante”

El coordinador del dispositivo mantiene que a Trapero “le hubiera costado el cese” dejar claro al president que la Policía autonómica iba a impedir el referéndum

De los Cobos: Queríamos ir de la mano de los Mossos y no romper la baraja
El coronel Pérez de los Cobos, durante su segunda jornada de declaración como testigo en el juicio contra la ex cúpula de los MossosAudiencia NacionalEFE

El coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos está convencido de que los Mossos tenían la llave para impedir el referéndum ilegal. Así lo ha puesto de manifiesto en su segunda jornada de declaración como testigo ante el tribunal que juzga por rebelión a la ex cúpula de la Policía autonómica, al insistir en que si los mandos del cuerpo, con el mayor Josep Lluís Trapero a la cabeza, hubiesen dado un últimátum a Carles Puigdemont, el 1-O “no hubiera salido adelante”. “Los Mossos tenían una ascendencia considerable sobre la Generalitat y sobre una parte considerable de la ciudadanía”, ha argumentado.

A preguntas de la abogada de Trapero, Olga Tubau, De los Cobos ha vuelto a reprochar al mayor que no dejase claro al entonces presidente de la Generalitat, en la Junta de Seguridad celebrada el 28 de septiembre de 2017, tres días antes de la consulta soberanista, que los Mossos estaban dispuestos a impedir el 1-O, un paso al frente que según él “seguramente le hubiese costado el cese”.

El testigo ha precisado que, pasado el 1 de octubre, supo por el comisario Ferran López que la cúpula de los Mossos se había reunido con Puigdemont para instarle a desconvocar el referéndum ante el peligro de que se produjeran graves alteraciones de orden público, pero según él no le advirtieron de que, de seguir adelante, “iba a tener a los Mossos enfrente”.

Pérez de los Cobos ha explicado que en la reunión de la Junta de Seguridad del 28 de septiembre de 2017, el responsable de la Policía catalana “habló en genérico de que la obligación de los Mossos es cumplir la ley” pero hizo hincapié en la necesidad de preservar la convivencia ciudadana, “que es a lo que se había referido el señor Puigdemont”, y no en los mandatos del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña de impedir el referéndum. “A mí lo que me parecía más peligroso era que a Puigdemont le estaba quedando claro que la actitud de los Mossos el día 1 difícilmente iba a ser de firmeza”.

Según ha contado, tras esa Junta de Seguridad se reunió con la magistrada del TSJ de Cataluña Mercedes Armas en la que le expuso su “preocupación” por la “interpretación sesgada” del auto en el que se ordenaba impedir el referéndum, al convertir la referencia a preservar “la convivencia ciudadana” en el mandato nuclear de la resolución. De los Cobos ha explicado que pidió a la instructora que modificara el auto, pero que ella se negó aduciendo que esa frase “no estaba en la parte dispositiva” por lo que era “como decir que el agua moja”.

El coordinador del dispositivo policial ha asegurado que su intención siempre fue “ir de la mano” de los Mossos el 1-O y no “romper la baraja”. “Nos equivocamos”, ha admitido tras lamentar que el mayor del cuerpo siempre pusiera “pegas a los requerimientos y mandatos”. "Mi percepción en ese momento es que Trapero esta alineado con los planteamientos de la Generalitat -ha matizado- pero en ningún caso que los Mossos iban a incumplir totalmente el auto. Pensaba que no iban a poner toda la carne en el asador, pero no que iban a dejar el asador sin carne”. Siempre se plantearon -ha añadido en relación a la jornada del referéndum ilegal- un escenario con “un grado de cumplimiento inferior al deseable pero no el que luego vimos”, que ha definido como de “inacción absoluta”.