Peligro yihadista

El peligro real para España de los yihadistas infiltrados entre inmigrantes

Las FSE extreman la vigilancia en Canarias para detectar terroristas

Miembros de la PolicÍa Nacional piden los papeles a algunos de los 200 inmigrantes de origen magrebÍ, que llegaron a las islas en los últimos días en pateras y cayucos y que se trasladaron gracias a la Cruz Roja a un hotel del sur de Tenerife. EFE/Ramón de la Rocha
Miembros de la PolicÍa Nacional piden los papeles a algunos de los 200 inmigrantes de origen magrebÍ, que llegaron a las islas en los últimos días en pateras y cayucos y que se trasladaron gracias a la Cruz Roja a un hotel del sur de Tenerife. EFE/Ramón de la RochaRam�n de la RochaEFE

El peligro es real y existen demasiados precedentes como para ignorarlo. Los yihadistas aprovechan los flujos de la inmigración ilegal para infiltrarse en Europa y cometer atentados.

El caso más reciente es el del terrorista que asesinó a tres personas en la basílica de Niza. El tunecino Brahim Aoussaoui, autor de la matanza, había llegado a Europa el pasado mes de septiembre vía Lampedusa, la isla más meridional de Sicilia y en la cual desembarcan la mayoría de inmigrantes que llegan a Italia desde el norte de África.

El caso más dramático es el de los atentados perpetrados en París en 2015. Muchos de los terroristas habían utilizado las vías de la inmigración para colarse en Europa.

El Estado Islámico mantiene una estrategia para utilizar todas las vías posibles con el fin de hacer llegar a Europa a sus combatientes, independientemente de la labor de adoctrinamiento que realizan para captar, por medio de la propaganda difundida a través de las redes sociales, a actores—lobos-- solitarios, con fin de que cometan atentados.

En España no estamos a salvo de este problema que, al menos hasta el momento, han podido prevenir las Fuerzas de Seguridad con la detención de los yihadistas, como ocurrió con un FTF (Freing Terrorist Figther) que había llegado a Almería en patera desde Argelia al frente de una célula formada por otros dos individuos; y el arrestado en Canarias, también llegado ilegalmente en una embarcación desde Marruecos, que se dedicaba a captar mujeres para el Estado islámico. Hay más casos.

El problema que sufre Canarias, con la llegada masiva de inmigrantes ha puesto de nuevo encima de la mesa el asunto de la posible infiltración de yihadistas., algunos de los cuales podrían ya encontrarse en España o en otros países de Europa.

Se ha tratado de desinformar a la opinión pública en el sentido de que todos los que llegan al archipiélago se quedan allí, pero la realidad es muy distinta, tal y como adelantó LA RAZÓN el pasado sábado y hoy mismo ha confirmado el presidente autonómico de Canarias: de los 21.000 inmigrantes llegados en el último año permanecen en las islas 10.000 u 11.000, mientras que las repatriaciones (a sus países de origen) han sido escasas por el cierre del espacio aéreo por la pandemia, de manera que hay que hacer “restas”, en referencia a que sí ha habido traslados a la península.

Traslados o viajes organizados por las mafias, que ofrecen un “paquete” completo, que incluye la travesía al archipiélago desde Marruecos y el traslado en avión a la península. Para ello, los inmigrantes llegan con sus pasaportes en regla, aunque no se puede descartar que haya falsificaciones.

Sin tener que recurrir a las mafias, se ha detectado, según agentes de las Fuerzas de Seguridad que trabajan sobre el terreno, la “huida” de inmigrantes de los hoteles en los que estaban alojados y, al disponer de documentación en regla, adquirir un pasaje en avión o barco y lograr llegar a la península.

Lo que parece claro, según las mismas fuentes, es que los que quieren llegar a occidente han encontrado, al menos hasta ahora, una vía más o menos segura para lograrlo. Además, cuentan con una opinión pública en Canarias absolutamente contraria a que las islas se conviertan en un nuevo Lampedusa o Lesbos, por citar localizaciones por las que entran los inmigrantes a Europa.

Las Fuerzas de Seguridad prestan especial atención para que individuos sospechosos de yihadismo o delincuentes de otro tipo puedan utilizar esta vía. Lo que ocurre es que hay potenciales terroristas que no están fichados y que pueden llegar con documentaciones falsificadas.

Tal y como adelantó LA RAZÓN, a los citados agentes les ha llamado la atención la juventud y la disciplina cuasi militar de muchos de los marroquíes que llegan al archipiélago. “Saben a lo que vienen, con un recorrido perfectamente establecido y su intención no es la de quedarse en Canarias”, subrayaron. Según diversos medios, algunos de ellos llevaban tatuados en sus brazos los emblemas de su supuesta pertenencia a fuerzas especiales de ejércitos magrebíes.

En las últimas horas, ha proseguido la llegada de pateras a Canarias. Salvamento Marítimo ha rescatado una embarcación con 51 inmigrantes a bordo de dos pateras cuando se encontraban cerca de la isla de Gran Canaria. Los inmigrantes han sido trasladados al muelle de Arguineguín.

Ej otra operación, Salvamento Marítimo y la Guardia Civil rescataron al sur de Gran Canaria a 180 ocupantes de siete pateras, que han sido desembarcados en el mismo muelle. La mayoría de los llegados son magrebíes.