Ferraz

La cara B de la «unidad»: el Congreso de los «caídos» del PSOE

Una cena de apoyo a Ábalos dispara las alarmas en Ferraz, que busca opacar gestos de respaldo a los salientes

Carmen Calvo (i) conversa José Luis Ábalos durante un receso en el Congreso, en una imagen de archivo
Carmen Calvo (i) conversa José Luis Ábalos durante un receso en el Congreso, en una imagen de archivoChema MoyaAgencia EFE

Estaba llamado a ser el Congreso de la «unidad» y en la dirección socialista no estaban dispuestos a permitir que nadie empañara esa imagen. La organización ha opacado, a lo largo de las dos primeras jornadas del cónclave, a cualquier figura que pudiera amargar la luna de miel que se buscaba escenificar en Valencia.

Sin embargo, la militancia socialista no atiende a corsés y expresa libremente su cariño por algunos de los perfiles que Sánchez no tuvo reparos en laminar en julio. Es el caso de Carmen Calvo y José Luis Ábalos. Quienes representaran la guardia pretoriana del presidente han tenido un papel discreto en este Congreso, que se ha visto engrandecido por el favor de las bases. La primera en despuntar fue la ex vicepresidenta, que se llevó la ovación de la primera jornada, en una mesa redonda sobre feminismo, que hizo que se le saltaran las lágrimas.

Esa misma noche, una cena organizada por el alcalde de Burjassot, Rafa García, disparaba las alarmas tanto en Ferraz como en el PSPV. Desde Madrid se ve con inquietud cualquier movimiento del ex ministro y eso que todavía no ha hecho ninguno. Pero su presencia intranquiliza y se trata de invisibilizar.

Ayer, ni su sucesor, Santos Cerdán, ni la vicesecretaria general, Adriana Lastra, mentaron al caído en sus discursos, y eso que estuvieron plagados de referencias, agradecimientos y demás florituras a muchos ex. También en el seno del PSPV las alarmas se dispararon y hay quien interpreta la cena como un rearme ante un próximo congreso nacional del PSPV, algo que los de Ábalos descartan totalmente.