El juez solicita una evaluación psiquiátrica del presunto terrorista de Algeciras

El juez de la Audiencia Nacional Joaquín Gadea ha ordenado una evaluación psiquiátrica al presunto yihadista Yassin Kanjaa que declaró este lunes por el asesinato a un sacristán en Algeciras (Cádiz). Las dudas sobre su salud mental han estado sobre la mesa desde el momento del ataque, machete en mano, la pasada semana y el magistrado quiere saber si se le puede imputar delito por lo sucedido o sus problemas mentales suponen algún tipo de eximente. Además, ha citado a declarar a 16 testigos.

El juez de refuerzo del Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional ha emitido hoy un nuevo escrito que, según informan fuentes jurídicas, acuerda “la exploración forense del presunto yihadista en prisión por estos hechos, Yassin Kanjaa a los efectos de informar sobre su imputabilidad”. El joven de 25 años y de nacionalidad marroquí está desde este lunes en prisión provisional, sin fianza a la espera de que avance la investigación y se resuelva si actuó solo (que es la hipótesis principal) o si lo hizo de acuerdo con alguna organización terrorista internacional. Se le imputa un delito terrorista de asesinato, uno de intento de asesinato y otro de lesiones por lo que se enfrenta a prisión permanente revisable.

Gadea indica que el reconocimiento médico se hará “con pleno respeto al derecho de la defensa del detenido” y con consentimiento previo. Así, oficia a la clínica forense del órgano judicial para que dos médicos se encarguen de hacer el examen psiquiátrico.

Asimismo, el instructor pide que se remita el informe de la autopsia del sacristán Diego Valencia que fue asesinado a la salida de la Iglesia Virgen de La Palma antes de las ocho de la tarde del pasado martes. Gadea quiere escuchar a todos los testigos que la Policía Nacional cita en sus informes como vigilantes de lo que sucedió aquella tarde en la que Kanjaa salió ataviado con una túnica negra y gritando cánticos sobre Alá. Hasta 16 personas están llamadas a declarar, incluidas las que resultaron heridas que tendrán la oportunidad de personarse como perjudicados de la causa. El hombre hirió de gravedad al párroco Antonio Rodríguez antes de terminar con la vida del sacristán laico.

Por la Audiencia Nacional pasarán los compañeros de piso de Kanjaa que explicaron a la Policía cómo había cambiado su actitud en los últimos meses. Pasando de beber alcohol y fumar hachís a estar totalmente entregado a la fe del Islam, escuchando el Corán en audios de su teléfono móvil.