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El grito de los exiliados: «No permitáis que se haga con el poder aquí»

Más de un centenar de venezolanos se concentraron ayer en el Círculo de Bellas Artes para protestar por la exposición «Venezuela de Verdad»
Más de un centenar de venezolanos se concentraron ayer en el Círculo de Bellas Artes para protestar por la exposición «Venezuela de Verdad»larazon

Banderas de Venezuela y rostros pintados con los colores de la enseña que no ocultaban la frustración por el desarraigo y la ira por las mentiras con las que Maduro y sus acólitos intentan lavar la imagen de su Gobierno. «Más de 200.000 homicidios al año no es un logro», gritaban unos 150 venezolanos que se concentraban frente al Círculo de Bellas Artes de Madrid para protestar por la exposición «Venezuela de Verdad», que se estaba inaugurando en esos mismos momentos. «Esta muestra es para nosotros un insulto de Maduro y Podemos, la Venezuela real es la que está aquí fuera. A un primo mío le asesinaron hace diez días en Caracas y todavía no nos han dado su cadáver», decía Rebeca Sindón.

«¡Señor embajador, salga para atendernos, que también somos venezolanos», gritaban, mientras los «delegados» salían del Círculo con una sonrisa en los labios y comentando: «Es mejor no hacerles el juego, hemos conseguido que no reventasen la inauguración». «Ustedes tienen que saber que la reserva internacional del Banco Nacional de Venezuela está en Suiza y que con ellas se ha pagado a los de Podemos, que se están enriqueciendo con nuestro dinero. No podéis consentir que Podemos gobierne aquí, os llevará a la ruina», afirmaba Daisy González, que lleva nueve años en nuestro país, «a la fuerza».

Vigilados a prudente distancia por la Policía, al terminar la concentración agradecieron a los agentes que no sucumbiesen a la presión de la embajada de Venezuela, «que ha intentado que nos disolviesen y les ha dicho que ellos no tienen autoridad en España y que aquí el derecho de manifestación es legítimo». Terminaron cantando el himno de su país, con dolor, añoranza y rabia «porque nos lo han robado y lo han desvirtuado».