Defensa

"Ya están en el aire": Así culminó el Ejército la "peligrosa" misión de rescate en Sudán

Más de 200 militares, cuatro aviones y blindados participaron en una difícil operación para evacuar a 104 personas en 48 horas. "No era una misión fácil. Nos podían pegar tiros"

Los militares españoles en Sudán salieron al encuentro del convoy de evacuados hasta su llegada al aeropuerto
El centenar de rescatados en la bodega del A400-M antes de despegarEuropa Press

«Ya están en el aire». El reloj apenas marcaba las 23:00 horas del domingo (en España y en Sudán) y el dispositivo militar implicado en el rescate de más de cien personas (entre ellas 34 españoles) confirmaba así que el avión A400-M del Ejército del Aire había despegado del aeródromo sudanés de Wadi Seidna con todos ellos a bordo y sin ningún percance. Se ponía así fin a algo más de 48 horas de una «peligrosa» operación militar de rescate en la que las Fuerzas Armadas españolas desplegaron a más de 200 militares, cuatro aviones y blindados en un país al borde de la guerra civil en el que cualquier cosa podría ocurrir a pesar de latregua declarada con motivo del fin del Ramadán. Eso sí, hasta mañana, martes, por la mañana, cuando está previsto aterricen en Madrid los 62 últimos uniformados, no dirán «misión cumplida», pues «hasta que no regresan todos sanos y salvos a casa, no se da por concluida la misión», aseguran a este periódico fuentes militares.

Se trataba de una Operación de Rescate de Personal No Combatiente (NEO, por sus siglas en inglés), que volvió a traer a la mente de muchos las imágenes de Afganistán de agosto de 2021, con el aeropuerto de Kabul sumido en el caos y con atentados en las inmediaciones. De ahí que los uniformados españoles fuesen preparados para cualquier incidente.

Todo comenzó a moverse el viernes por la mañana a 1.250 kilómetros al Este de la capital de Sudán, Jartum, en el aeropuerto de Yibuti, donde España cuenta con el Destacamento «Orión» (49 efectivos) como parte de la operación «Atalanta». Allí se centralizó el operativo y hasta allí llegaron cuatro aviones del Ejército del Aire (tres A400-M y un A330) que participaron en la operación. Fueron llegando poco a poco, trasladando tanto el material necesario (vehículos, equipos y sistemas) como los militares.

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Así, el sábado por la mañana ya había en este pequeño país del Golfo de Adén más de 200 uniformados: 90 del Ejército de Tierra (Brigada Paracaidista y Mando de Operaciones Especiales), alrededor de 80 del Ejército del Aire (Ala 31, 45 Grupo, Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo y Unidad Médica de Aeroevacuación) y una treintena de otras unidades, como un equipo de reconocimiento y enlace del Mando de Operaciones, personal del Mando Conjunto de Operaciones Especiales, del Componente Aéreo de la Fuerza Conjunta y del Centro de Inteligencia de las Fuerzas Armadas.

Todo estaba listo a la espera de aprovechar esas ventanas de seguridad que se preveía iban a abrirse por la tregua. Y ayer domingo por la mañana se decidió lanzar la operación y entrar a Sudán.

Primero aterrizó en el aeródromo de Wadi Seidna un A400-M con blindados «Vamtac» y una treintena de efectivos como avanzadilla para ir preparando el terreno y dar protección al resto de uniformados, que llegaron en otros dos aviones con los demás militares y más blindados que participaron en una difícil operación. «No era una misión fácil. Nos podían pegar tiros», resumen las mismas fuentes militares.

España evacúa a 30 españoles y otros 70 civiles de Sudán por el conflicto
España evacúa a 30 españoles y otros 70 civiles de Sudán por el conflicto Agencia EFE

Con todo preparado en suelo sudanés, comenzaba la parte más peligrosa: el rescate de 72 ciudadanos que estaban en la embajada española (otros 32, ninguno español, llegaron por sus propios medios al aeródromo). En un convoy escoltado por la Policía, las personas que se refugiaban en la delegación española cubrieron por carretera los 35 kilómetros que les separaban del aeródromo. A pocos kilómetros les interceptaron los militares españoles con sus blindados, completando su traslado hasta «zona segura» sin incidentes. Sin tiempo que perder, embarcaron en uno de los aviones con destino a Yibuti, desde donde 70 regresaron a España.

Además de a 34 españoles también se rescató a residentes en Sudán de once nacionalidades, entre ellos portugueses, italianos, polacos, irlandeses, mexicanos, venezolanos, colombianos, argentinos y sudaneses, según el Ministerio de Exteriores. Pasadas las 11:00 de esta mañanaaterrizaron en la base de Torrejón de Ardoz, donde les esperaba el ministro de Exteriores, José Manuel Albares. «Es un momento feliz y de alivio», fueron las palabras del jefe de la diplomacia española que informó de que en el vuelo también arribó el hasta ahora embajador en Sudán, Isidro González, que procedió al cierre de la embajada ante el recrudecimiento de los combates en el país africano. Los Reyes felicitaron a Albares y Robles, así como al Jefe de Estado Mayor de la Defensa (JEMAD),almirante general Teodoro Esteban López Calderón; al comandante del Mando de Operaciones (CMOPS), teniente general Francisco Braco, y al embajador español.