La Fiscalía ha interpuesto 110 recursos ante el Supremo por la ley del “solo sí es sí”

La Fiscalía trata de hacer de muro de contención para que los violadores y pederastas no abandonen la cárcel antes de tiempo. Fiscales de todo el territorio estudian caso a caso para recurrir las sentencias derivadas de la nueva ley del “solo sí es sí” que ha provocado ya más de 700 reducciones de condenas de delitos sexuales en toda España. En total y según los datos del Ministerio Público facilitados a este periódico, se han interpuesto ya 110 recursos de casación ante el Tribunal Supremo para que estos magistrados adopten un criterio uniforme. Además, fuentes fiscales añaden que se espera que la cifra crezca tras las indicaciones en la nueva circular del fiscal general del Estado Álvaro García Ortiz.

Pasaron cuatro meses desde que la Secretaría Técnica de la Fiscalía emitió la primera guía para que, por norma general, se opusieran a las rebajas de condenas -el decreto del 21 de noviembre de 2022- hasta que se difundió la segunda -la circular del 29 de marzo de 2023- con nada menos que 100 páginas más. La Fiscalía General estudió gran parte de los fallos emitidos hasta ahora y mostró cómo se debe actuar en casos de agresiones sexuales a personas mayores y menores de dieciséis, cómo abordar la nueva regulación del consentimiento, qué es el acoso sexual, cómo deben revisarse las sentencias, etc.

Si hasta ahora una de cada siete sentencias se recurre ante el órgano que crea la jurisprudencia, la previsión con este nuevo documento es que la cifra “aumentará porque se van a recurrir más revisiones con el criterio de la circular”, expresan fuentes del Ministerio Público.

El Tribunal Supremo se ha pronunciado sobre sentencias que tenía sobre la mesa de delitos sexuales y han pasado por ellas la nueva ley ideada por el Ministerio de Igualdad para restar años de pena si ésta era más favorable para el reo, pero todavía no ha revisado ninguna de esas rebajas que otros tribunales hayan hecho previamente. Es decir, todas las condenas que se están produciendo en Audiencias provinciales y tribunales superiores de justicias todavía pueden cambiar en la Sala de lo Penal que dirige Manuel Marchena.

Precisamente, la circular del Ministerio fiscal menciona la necesidad de recurrir porque si bien existe el principio de retroactividad para que la norma más beneficiosa se aplique al reo esta entra en “fricción” con “los de seguridad jurídica” que se consolidan cuando la sentencia es firme. El documento establece que para valorar la ley más beneficiosa para el agresor, se ha de atender a la totalidad de las normas aplicables, o lo que es lo mismo, también hay que tener en cuenta los agravantes que la nueva ley del “solo sí es sí” plantea. “Se deberá extremar la cautela a la hora de realizar la correcta equivalencia entre el tipo penal derogado y el vigente”, reza.

Estas líneas maestras, no obstante, son susceptibles de volver a modificarse una vez el PSOE apruebe el parche que pretende hacer en el Código Penal para volver al arco punitivo anterior a la reforma de Igualdad.

Mientras esta reforma sigue su trámite parlamentario, los beneficios a los agresores sexuales se siguen produciendo. El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) recabó los datos a principios de marzo para determinar que en total se habían producido 721 reducciones de condenas y 74 excarcelaciones de violadores en todas las comunidades autónomas. Preguntado el CGPJ si tiene alguna actualización de la cifra dicen estar volviendo a recabar las sentencias más nuevas, pero lo cierto es que el goteo ha seguido produciéndose.

Por ejemplo, el pasado 23 de marzo la Audiencia Provincial de Teruel rebajó tres condenas de agresión sexual con violencia e intimidación. Los tres hombres habían sido condenados a cinco años de cárcel por abordar conjuntamente a una mujer en los lavabos de un bar de copas de Teruel y realizarle tocamientos. Los magistrados les rebajan la pena dos años y, al haber cumplido ya la estancia entre barrotes, los dejan en libertad.

Algo similar ocurrió en Canarias, donde el Tribunal Superior de Justicia estimó el pasado 30 de marzo un recurso presentado por un profesor que estaba condenado a cuatro años y un mes de prisión por un delito continuado de abuso sexual a una alumna. El hombre impartía Biología a alumnos de 4º de la ESO y comenzó a acercarse a una chica que parecía no estar muy integrada en clase, llegando a hablar con ella a la salida del centro donde en muchas ocasiones la menor le esperaba. El docente se ganó su confianza y terminaron teniendo distintos actos de carácter sexual. Los togados le han rebajado la pena dos años.