El Gobierno se aferra al pacto de pensiones para enterrar el «solo sí es sí»

La coalición cierra una de las semanas más duras de su trayectoria gubernamental. La reforma de la ley del «solo sí es sí» ha «volado todos los puentes» entre PSOE y Unidas Podemos, tal como reconocían los socialistas este martes, tras asistir al encendido discurso que su socio le dedicó desde la tribuna del Congreso y en el que, entre otras lindezas, le tildó de «fascista». A pesar de la crudeza del tono y la difícil convivencia, la ruptura sigue sin estar sobre la mesa. Hasta en el momento de más tensión, las partes implicadas en su supervivencia -Pedro Sánchez y Yolanda Díaz- se conjuraron para mantener viva la entente que les une, aunque sea con respiración asistida. Ese balón de oxígeno llegó de manera providencial e indisimulada en el día de ayer con la certificación del esperado pacto de las pensiones. El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, consiguió cerrar la reforma con Podemos, con el aval de Bruselas, lo que permite superar uno de los principales hitos pendientes para seguir manteniendo ininterrumpido el flujo del maná europeo.

El Gobierno intenta con este acuerdo dar carpetazo a la crisis provocada por la ley del «solo sí es sí» y seguir adelante, proyectando imagen de continuidad y de viabilidad ejecutiva. Pasar pantalla. «Solo ha habido este punto de fricción y no habrá más», anticipa un ministro, intentando restar trascendencia al choque que más ha elevado la tensión entre ambos socios. Los planes inmediatos de Moncloa pasan ahora por acelerar la agenda legislativa, con el foco en la Ley de Vivienda y la «mordaza» en la recámara, para trasladar una sensación de proactividad gubernamental y sintonía dentro del Consejo de Ministros.

En Moncloa son conscientes de que la imagen de ruido interno desmoviliza al electorado progresista, especialmente a las mujeres por las connotaciones de la crisis del «solo sí es sí». El PSOE había explotado tradicionalmente este nicho de votantes –más del 50% en las generales de noviembre de 2019–, pero la tendencia se está revirtiendo. El último CIS arrojó resultados demoledores para los socialistas. Las tripas del barómetro de febrero, lanzado estratégicamente para presionar a los morados hacia el acuerdo en el «solo sí es sí», ubicaba a Podemos (32%) como el partido que más está haciendo por la igualdad. Lo colocaba por delante del PSOE (18,1%). Otro dato preocupante para los intereses socialistas es que el 37,4% de sus votantes cree que Podemos es el que más está haciendo por la igualdad.

«Defiende lo que piensas»

El Gobierno intenta ahora recuperar la iniciativa y, en esta dinámica de marcar la agenda, pone en marcha ya su estrategia de precampaña. Pedro Sánchez, que hoy participa en Huelva en la clausura de la Convención Municipalista de Andalucía, estrenará el lema de la precampaña que el PSOE utilizará durante los meses que restan hasta que comience el periodo oficial de campaña. «Defiende lo que piensas» es el mensaje que busca interpelar a los votantes, haciendo un «llamamiento a la reflexión, a confrontar los hechos frente a los bulos, la política útil frente al insulto vacío y la descalificación», según informan desde el PSOE.

Los socialistas son conscientes de que necesitan un potente ejercicio de movilización de cara a las elecciones del 28-M, en las que el partido sale a defender la importante cota de poder territorial que consiguió en 2019. Gobiernan en 9 de las 12 comunidades autónomas que se miden en las urnas. Estiman, que necesitan 10 puntos más de participación de su electorado para conseguir un resultado solvente que les permita revalidar el poder y dar la vuelta a las encuestas adversas.

De este modo, una de las patas de la estrategia del PSOE será defender la gestión gubernamental que se ha desplegado durante la legislatura y reivindicar que este tipo de políticas útiles solo son posibles si son los socialistas los que están en el Gobierno. En este punto, dibujan a sus antagonistas PP y Vox con una «agenda oculta» que busca «desarmar el escudo social, desmontar lo público y volver a la ley del más fuete. El sálvese quien pueda», señalan desde el PSOE. «Defiende lo conquistado y defiende las conquistas del mañana» es la arenga que los socialistas quieren dirigir a los electores para tratar de atraer su voto ante la amenaza de que sea una «coalición del miedo» de «la derecha y la extrema derecha» la que llegue al poder.