La Casa Real asegura que el Monarca no tiene ninguna cuenta en Suiza

El 20º aniversario de la muerte de Don Juan este año puso sobre la mesa la incógnita respecto al paradero de 1.100 millones de pesetas que el padre del Rey dejó en concepto de herencia a través de tres cuentas, domiciliadas en Suiza. La Casa Real anunció que abriría una investigación y, tras cuatro meses de trabajo, fuentes de Zarzuela resolvieron ayer que, a día de hoy, Don Juan Carlos no tiene ninguna cuenta en el extranjero, ya que aseguran que se cancelaron antes de 1995.

Don Juan murió el 1 de abril de 1993. Según la explicación que aporta la Corona, la Societé de Banques Suisses desapareció, al igual que la otra entidad bancaria, la Societé Generale Alsacienne de Banques, que fue absorbida por Societé General. Con estos hechos se complementa la argumentación de la Institución respecto a la dificultad de la investigación: «No disponemos de documentación alguna, han pasado 20 años». Y apostillan que dichos bancos destruyeron los archivos, ya que no tienen la obligación de conservar los datos de sus clientes más allá de dos lustros. Algo que, desde Hacienda se echó por tierra, ya que técnicos del Ministerio lo negaron: «Aunque sea de hace 20 años no se ha perdido». Recordaron que en aquel momento, la información tributaria ya estaba informatizada, y explicaron que el pago fiscal por la herencia del padre de Don Juan Carlos debe estar en la notaría, al hilo de que desde la Institución se aseguró que las indagaciones se han realizado a través de las entidades financieras suizas, sin que el Ministerio de Hacienda pudiera aportar datos.

Si la transferencia bancaria fue cancelada, ¿cuál ha sido el destino final que ha tenido ese dinero? Según las mismas fuentes –que, tal y como apuntan los resultados de la investigación de Zarzuela, no pudieron concretar la cuantía de la herencia recibida por Don Juan Carlos– , esa cantidad no se transfirió a otra entidad bancaria, por lo que la cuenta «quedó a cero en 2005». La Familia Real, y en concreto el Jefe de Estado, habría empleado ese dinero en liquidar las deudas contraídas por los Condes de Barcelona.

No obstante, la Institución Monárquica sí tiene la «convicción» de que los albaceas pagaron los impuestos hereditarios –aunque no aportaron pruebas documentales–, en concreto por Luis de Ussía y Gavalda, conde de los Gaitanes, fallecido en el año 2005 y que fue quien llevó el peso de las gestiones sobre la herencia dentro del equipo de albaceas nombrado por Don Juan.