Los bloques de la vergüenza

Las Fuerzas de Seguridad están investigando la procedencia de los 70 bloques de hormigón arrojados por las autoridades gibraltareñas al mar junto al puerto de La Línea de la Concepción (Cádiz), según fuentes conocedoras del asunto consultadas por LA RAZÓN. De esta forma, buscan clarificar si los mazacotes, que han acabado con un caladero en el que tradicionalmente faenaban pescadores de la zona, han sido fabricados en España, en Gibraltar o en algún otro país.

El hundimiento de estos bloques, que se llevó a cabo el pasado 24 de julio, ha aumentado la tensión en la verja pero, lejos de querer calmar la situación, el Ejecutivo de Fabian Picardo parece instalado en la provocación. De hecho, la delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, adelantó ayer que la Guardia Civil va a investigar si Gibraltar ha arrojado más bloques de hormigón al mar, después de haber recogido denuncias de los pescadores en este sentido.

De acuerdo con fuentes de Salvamento Marítimo consultadas por Ep, el pasado martes sobre las 3:00 horas recibieron un aviso de que el pesquero «Unión Vázquez Blanco», perteneciente a la Cofradía de Pescadores de Algeciras (Cádiz), se encontraba a la deriva a unas dos millas al sur de Punta Carnero después de que sus redes quedarán enganchadas. La embarcación tuvo que ser remolcada a puerto por el barco Luz de Mar de Salvamento Marítimo.

En declaraciones a este periódico, el armador del «Unión Vázquez Blanco», Manuel Vázquez, relata cómo se engancharon con «algo», supuestamente nuevos bloques ubicados muy lejos de donde están los lanzados el 24 de julio. «Estábamos agarrando en nuevas zonas e imaginamos que hay más bloques aparte de esos bloques», explica.

Tuvieron que llamar a Salvamento Marítimo para que los remolcara hasta la Bahía porque la marea «tiró» de ellos, quedaron sueltos en medio del Estrecho y tenían que dejar «todo el arte» que llevaban a bordo. «Se ha perdido mucha red, 32 paños que pueden oscilar entre los 250 y los 280 euros de valor en el mercado», subraya, antes de incidir en que, si se suma esta cantidad a las reparaciones que deben acometer, las perdidas pueden elevarse hasta los 12.000 o 14.000 euros.

«Los barcos del cerco estamos rompiendo redes donde nunca se han roto, bien porque hayan tirado bloques o coches para el desguace, bien porque los mercantes hacen reparaciones y tiran cosas. Nosotros hemos recogido en las redes portalones e incluso vigas», denuncia el armador de esta trahíña, que ha mantenido una reunión con la Delegación del Gobierno, la Guardia Civil, el alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce, y el capitán marítimo de Algeciras, Julio Berzosa, para tratar el asunto. Aunque no ha interpuesto denuncia alguna ante la Guardia Civil, Vázquez sí reclamará a su seguro las consecuencias del incidente.

«Estamos sufriendo para ganarnos el pan amargadamente», lamenta el pescador, que no se encontraba a bordo cuando ocurrió el suceso, pero que a estas alturas del conflicto pesquero con el Peñón sólo espera que no le pase nada a ningún tripulante. «Cuando vino mi hijo a las 8:00 horas de la mañana diciéndome que había perdido la red, le he preguntado si le había pasado algo a algún tripulante y cuando me ha dicho que no, mi respuesta ha sido "date por contento"», zanja.

En la misma línea de la denuncia del «Unión Vázquez Blanco», Landaluce, que también es diputado nacional del PP, aseguró ayer que «varias» embarcaciones pesqueras han roto sus redes «repetidas veces» en zonas «donde nunca se enganchaban». Según recalcó, esto los lleva a sospechar que las autoridades de Gibraltar han podido lanzar al mar otros bloques de hormigón «nocturnamente» en zonas en las que tradicionalmente faenan los pesqueros españoles, además de en la consabida área en la que «a la luz del día» se lanzaron 70 bloques.

«Puede que nos encontremos con una corona de espinas del Gobierno de Gibraltar en torno al caladero y el mar territorial español que rodea la colonia», expuso Landaluce, antes de recordar que el Gobierno va a trasladar este asunto a los representantes de la Unión Europea y que, previsiblemente, éstos visitarán la zona. De acuerdo con el alcalde de Algeciras, no sólo serán transmitidas a la Comisión Europea las «agresiones» a los intereses del Campo de Gibraltar, como el contrabando de tabaco ilícito, sino también las «agresiones» medioambientales cometidas porque «se daña el entorno de la Unión» y esto afecta a la UE.

Nuevos caladeros

En vista de los daños que están padeciendo los pescadores de Algeciras y La Línea, el subdelegado del Gobierno en Cádiz, Javier de Torre, anunció ayer que éstos podrán faenar en dos nuevos caladeros de la bahía de forma «paliativa», hasta que sean retirados los bloques lanzados por Gibraltar. Tras mantener una reunión con representantes de las cofradías de pesca de ambas localidades gaditanas, explicó que los nuevos caladeros se situarán en el fondeadero que existe a poniente del muelle de La Alcaidesa, para lo que habrá que «despejar» primero a las embarcaciones allí fondeadas –veleros, sobre todo–, y en la playa de Levante.

Asimismo, De Torre señaló que la habilitación de estas nuevas zonas para la pesca será «compatible» con las ayudas impulsadas por el Ejecutivo para compensar a los pescadores que no pueden faenar por la presencia de los bloques de hormigón llanitos, informa Ep.