28-M

El PNV y el PSOE se reparten el poder en el País Vasco, aunque necesitan el plácet del PP

Nacionalistas vascos y socialistas necesitan el concurso del PP en el Ayuntamiento de Vitoria y las diputaciones de Guipúzcoa y Álava

PNV remite a las territoriales sus listas para el 23-J, en las que repite Aitor Esteban
PNV remite a las territoriales sus listas para el 23-J, en las que repite Aitor EstebanEuropa Press

El acuerdo de gobernabilidad alcanzado entre PNV y PSOE permitirá que los jeltzales gobiernen en la Diputación de Vizcaya, así como en las de Álava y Guipúzcoa, aunque en esta última necesitaría el apoyo del PP. Por su parte, los socialistas se asegurarían la Alcaldía de Vitoria, pero también tendrían que buscar el aval de los 'populares'.

En concreto, este acuerdo llevará a la Diputación Foral de Vizcaya a la candidata del PNV, Elixabete Etxanobe, lo que le convertirá en la primera mujer diputada general en el territorio vizcaíno.

Sin embargo, en la Diputación foral de Álava, PNV, con 15 apoderados, y el PSE-EE, con nueve junteros, no suman los 26 necesarios para la mayoría absoluta, de forma que el PP sería clave para decidir quien gobierna.

Por su parte, en Guipúzcoa el PNV y PSE tendrían que sumar el apoyo del PP para lograr la mayoría absoluta de 26 votos que les permitiría impedir que EH Bildu se haga con el gobierno foral.

El PNV podría gobernar en 81 municipios vascos y el PSE-EE en 12, al tener mayoría absoluta o en aplicación del acuerdo de gobernabilidad anunciado este viernes por jeltzales y socialistas. De esta forma, se harían con los gobiernos de 93 de las 251 localidades de Euskadi.

En el caso de Guipúzcoa, el PNV gobernará en tres localidades al tras las elecciones del 28 de mayo, y en otras seis se haría con la alcaldía gracias al acuerdo con los socialistas. Por su parte, dos municipios guipuzcoanos tendrán alcaldes socialistas por mayoría absoluta en las urnas y otros cuatro podrían tenerlo en base al acuerdo de gobernabilidad con el PNV. En San Sebastián, el PNV se garantizaría la alcaldía, al sumar sus nueve ediles a los cinco concejales del PSE, con lo que llegarían justo a los 14 ediles necesarios para la mayoría absoluta.

En Álava, el PNV gobernará en 18 municipios al haber logrado mayoría absoluta en los comicios del 28 de mayo, mientras que podría tener otros dos alcaldes con el apoyo del PSE. En los municipios de Kuartango, Bernedo, Zigoitia y Erriberabeitia el PNV necesitaría del apoyo del PP, mientras que, para tener alcaldes, los jeltzales tendrían que sumar a PSE y PP en Oyon.

La localidad alavesa de Zambrana tendrá alcalde del PSE-EE, por mayoría absoluta, e Iruña de Oca tendría alcaldía socialista en base al acuerdo de gobernabilidad con el PNV. En Vitoria-Gasteiz, donde EH Bildu fue la fuerza más votada, se tendrá que resolver el triple empate a seis ediles entre PSE, segundo partido con más votos, PP y PNV. Los socialistas necesitarían del apoyo de jeltzales y populares para hacerse con la alcaldía.

Además, en Llodio, donde ganó EH Bildu, Alegría-Dulantzi, Arratzua-Ubarrundia y Ayala, donde tiene más votos el PNV, serán las candidaturas vecinales o plataformas independientes las que resuelvan la gobernabilidad.

En Vizcaya, el PNV ha conseguido mayoría absoluta en 38 municipios y podría tener alcalde en 14 más en base al acuerdo con los socialistas. Para hacerse con las alcaldías de Durango y Getxo, los jeltzales tendrían que sumar también el apoyo del PP.

Por su parte, los socialistas tendrán alcalde en un municipio por mayoría absoluta y en otros tres también lograrían la alcaldía con el respaldo de los jeltzales.

En Bilbao, donde el candidato jeltzale, Juan Mari Aburto, superaría los 15 votos para ser elegido alcalde nuevamente, gracias al acuerdo de gobernabilidad, que sumaría los 12 concejales del PNV y los cinco de los socialistas.

En cuanto a EH Bildu, gobernará, con mayoría absoluta, en 12 localidades alavesas, en 32 vizcaínas y 46 guipuzcoanas. En Elorrio, Sopela y Urduliz (Vizcaya), la coalición soberanista es la fuerza más votada, pero Elkarrekin Podemos tendrá la llave de la gobernabilidad. Lo mismo ocurre con las localidades guipuzcoanas de Deba, Andoain, Arrasate-Mondragón, Azkoiti, Errenteria, Ordizia y Pasaia. EH Bildu también obtendría la alcaldía en municipios donde han sido primera fuerza y se han garantizado el apoyo de las candidaturas vecinales o plataformas independientes: Abadiño, Arrigorriaga, Galdakao y Gernika. En Durango, donde la coalición abertzale ganó en votos, conseguir la alcaldía dependerá del sentido del voto del PP.

Por otro lado, en Barrika, Bermeo y Mundaka, a pesar de no ser la primera fuerza, EH Bildu se haría con las alcaldías también con el respaldo de los independientes.

Por otro lado, candidaturas vecinales y plataformas independientes han conseguido mayoría absoluta en 31 municipios vascos: 19 en Guipúzcoa, ocho en Vizcaya y cuatro en Álava.

El Partido Popular gobernará con mayoría absoluta en la localidad alavesa de Baños de Ebro. Además, ha sido el partido más votado en Laguardia y Labastida pero, para lograr la alcaldía en ambos municipios dependerá de la posición que adopte el PNV.

En cuanto a la gobernabilidad en las diputaciones forales, el acuerdo de jeltzales y socialistas posibilitará que la candidata del PNV en Vizcaya, Elixabete Etxanobe, sea la primera mujer diputada general en el territorio vizcaíno. Sin embargo, en la Diputación foral de Álava, PNV, con 15 apoderados, y el PSE-EE, con nueve junteros, no suman los 26 necesarios para la mayoría absoluta, de forma que el PP sería clave para decidir quien gobierna. Por su parte, en Guipúzcoa el PNV y PSE tendrían que sumar el apoyo del PP para lograr la mayoría absoluta de 26 votos que les permitiría arrebatar el gobierno foral a EH Bildu, primera fuerza en este territorio, con 22 junteros.