Crear conciencia a los más pequeños a través de la moda

Una empresa de zapatos, Toms, ha tomado una gran decisión: por cada par de zapatos que un cliente compre, ellos destinarán otro a quién lo necesita. Trabajan con más de 55 países y ya han entregado 75 millones de pares de zapatos.

Una empresa de zapatos, Toms, ha tomado una gran decisión: por cada par de zapatos que un cliente compre, ellos destinarán otro a quién lo necesita. Trabajan con más de 55 países y ya han entregado 75 millones de pares de zapatos.

Todo surgió tras un viaje a Argentina, país en el que vio como los niños y niñas más desfavorecidos no podían ser escolarizados al no poder hacer frente al coste de un par de zapatos. Además de la imposibilidad de acudir al colegio, el hecho de ir descalzos provoca enfermedades como la podoconiosis (enfermedad inflamatoria causada por un contacto prolongado con sustancias minerales irritantes del suelo) o infecciones por heridas en los pies, cualquiera pudiendo derivar en el fallecimiento de los más pequeños. Tomando como referencia la alpargata argentina, Mycoskie decidió crear un modelo de negocio basado en el “one for one”, es decir, que por cada par de zapatos que se vendiesen se entregaría un par a un niño o niña necesitado. Desde su fundación hasta ahora, el único objetivo de la empresa es ayudar a los más necesitados y mejorar sus condiciones de vida para que tengan un futuro más fácil y puedan salir adelante.

TOMS es la compañía original en el modelo “one for one” y actualmente colabora en más de 55 países. Su ayuda no se limita a los zapatos sino que han creado diversos proyectos para cubrir múltiples necesidades. Acciones como el “Sight giving” que se centra en ayudar a personas con problemas de visión mediante la venta de gafas tanto de vista como de sol; el proyecto “Water giving”, que proporciona agua potable gracias a su negocio de café; el proyecto “Safe birth giving”, que garantiza un parto más seguro e higiénico a través de sus bolsos y el proyecto antibullying crea programas de prevención para los más jóvenes con la ayuda de las mochilas de la misma marca.

Uno de los grandes problemas actuales es la migración de millones de personas debido a situaciones de guerra o pobreza extrema. En el mundo hay más de 65 millones de refugiados y más de la mitad son niños. Las difíciles condiciones en las que huyen de sus países no les permiten llevarse con ellos la mayoría de sus bienes y por ello la firma proporciona calzado para estos niños. Gracias a esta acción pueden prevenir multitud de problemas de salud y les permiten recibir una educación. Para muchos de estos niños los zapatos de TOMS son los primeros que tienen propiamente suyos, lo que además de ser una mejora física lo es también psicológica, ya que pueden escolarizarse y sienten que tienen algo nuevo exclusivamente para ellos.

TOMS fue creada para ayudar a los demás y lo realiza a través de ONGs locales y organizaciones humanitarias. Coopera con más de 90 asociaciones aprovechando el conocimiento que estas asociaciones tienen de sus regiones y pueden determinar cómo repartir estos bienes de la mejor manera posible. Además de medicinas y alimentos, las necesidades de los niños y niñas en esta situación van mucho más allá. El calzado es una forma de complementar el tipo de ayuda humanitaria que reciben por parte de estas ONGs, ya que les ayudan a prevenir enfermedades o ser escolarizados y esto permite un progreso tanto de su futuro como en lo que aportarán a sus comunidades. Cada pequeña ayuda supone una mejora muy grande en su calidad de vida.

La finalidad de la iniciativa, y por lo que todo empezó, fue el calzar a niños y niñas cuyas familias no tenían medios económicos para ellos, y dándose cuenta de la gran labor que podían realizar han ido desarrollando el resto de modelos de negocio One for One a lo largo de sus 11 años de historia. Desde sus comienzos hasta ahora el tipo de calzado que donan ha evolucionado y actualmente cuentan con cinco modelos diferentes dependiendo de las necesidades y condiciones climatológicas del país: alpargatas, zapatillas deportivas, calzado resistente al agua, botas de invierno y zapatos para ir al colegio. Gracias a esta acción han sido entregados más de 75 millones de pares de zapatos, cambiando la vida de millones de niños alrededor del mundo.

El proyecto ha llegado a tal magnitud que ya colaboran en 55 países con la donación de zapatos y continúa creciendo, al igual que sus productos que han pasado de centrarse en las alpargatas a abarcar todo tipo de calzado para hombre, mujer e infantil, continuando con la filosofía “one for one”.

El objetivo fundamental es buscar concienciar a través de la moda de la importancia de las pequeñas acciones que podemos realizar para ayudar a los demás, ya que tan solo comprando un par de zapatos, una mochila o un bolso estamos ayudando a mejorar la vida de otras personas. La satisfacción de los más pequeños de recibir un par de zapatos nuevos que les permita escolarizarse, jugar en la calle sin riesgo a contagiarse de enfermedades es algo que está al alcance de nuestra mano adquiriendo un par de zapatos Muchas veces no somos conscientes de las facilidades que tenemos y las dificultades por las que pasan millones de personas en el mundo, y cómo un gesto tan simple como comprar un par de TOMS puede cambiar la vida de otra persona.