Vida cotidiana

La patata, tan querida como temida: ni engorda como se cree ni hay que eliminarla para adelgazar

Es de los alimentos con peores fama a la hora de hacer dieta y ha sido una gran protagonista a la hora de evitar hambrunas en la vieja Europa en períodos de guerras

La patata, tan querida como temida: ni engorda como se cree ni hay que eliminarla para adelgazar
La patata, tan querida como temida: ni engorda como se cree ni hay que eliminarla para adelgazarlarazon

La patata, a pesar de su origen, ha sido y será uno de los ingredientes básicos de la gastronomía de los países europeos pero...tiene una fama terrible: que engorda. Y sin embargo no es del todo cierto.

Pocos alimentos hay que gusten tanto como las patatas y que tengan, a su vez, tan mala como inmerecida fama a la hora de hacer una dieta. En Europa comenzamos a consumirla en la Edad Moderna después de que los españoles la importásemos de la recién descubierta América. Eso sí, en un principio se trajo como como curiosidad botánica y se tardó algunos años en consumirla como alimento. No se sabe a ciencia cierta cómo fue pero a buen seguro alguno que tenía hambre y que, para su fortuna, se dio cuenta de que esta curiosidad botánica, no solo estaba riquísima, sino que era una gran fuente de alimento, fácil de cultivar y baratísima. Tan barata que durante siglos ha sido considerado un alimento para pobres, tanto es así que ha salvado la vida de no pocos en épocas de gran carestía alimentaria.

La patata, a pesar de su origen, ha sido y será uno de los ingredientes básicos de la gastronomía de los países europeos pero...tiene una fama terrible: que engorda. Y sin embargo no es del todo cierto. Depende de cómo se cocine y de qué cantidad se tome. Como casi siempre. El equipo gastronómico de La Gran Pulpería, un resturante gallego de Madrid donde una de sus especialiades es, precisamente, los cachelos, patata cocida con sal, y que se suele acompañar con el pulpo, nos lo cuenta.

Lo bueno que nos aportan:

- Son ricas en almidón, por lo tanto, son una gran fuente de energía. Son ideales en las dietas de los deportistas.

- Contienen vitaminas del grupo B, B1, B6, vitamina C, e hidratos de carbono complejo.

- Minerales: magnesio, fósforo, calcio, ricas en potasio,

- Son ricas en aminoácidos como la lisina y el triptófano.

-Tienen mucha fibra por lo que favorecen el tránsito intestinal

-Tienen un alto contenido en potasio lo cual favorece que se reduzca la hipertensión. Eso sí, para ello han de estar cocidas, al vapor o asadas, sin salsas y con poquísima sal o incluso sin ella.

-Por los hidratos de carbono complejo que contiene nos favorece para mantener los niveles adecuados de azúcar en la sangre.

-Ayudan a reducir la inflamación en caso de padecer de problemas reumáticos, inflamación de próstata, inflamación de la vejiga urinaria,

En la imagen, pulpo á feira con cachelos, de la Gran Pulpería

La ciencia ha demostrado que no engorda

Buenas noticias para los amantes de las patatas: según un estudio (publicado en PubMed, aquí), las patatas, no engordan. Después de haber hecho un estudio con 90 personas, pasado un tiempo, se comprobó que aquellos que comían patata perdían peso frente a aquellos que no, quizás por el efecto saciante.

¿De dónde viene, entonces, su mala fama? Probablemente de la forma de cocinarlas más popular: las patatas fritas cuyo índice calórico es muchísimo más elevado pero por el aceite, no por la patata. Por el aceite frito, además que, no es que engorde más que el crudo (otro mito) sino que al freírlo se absorbe más cantidad.

¿Cómo comer patata de forma saludable?

Lo mejor es cocida o asada y también hay que vigilar las cantidades. Una ración media de patatas cocidas sin piel (180 g) contiene unas 140 calorías, un contenido energético muy inferior al de la misma cantidad de pasta cocida sin inlcuir ninguna salsa (286 calorías) o de arroz cocido (248 calorías).

Una de las mejores y más ricas recetas es como se sirve en la Gran Pulpería, con aceite y sal. Pero ahora en verano es muy buena idea tomarla fría (engorda menos) en un buen bol de ensalada.

Tal y como explica Personal Trainer en su web:

Cocidas con piel: 66 calorías por cada 100 gramos.

Asadas sin piel: 77 calorías por cada 100 gramos.

Asadas con piel: 85 calorías por cada 100 gramos.

Puré de patatas con leche y mantequilla: 85 calorías por cada 100 gramos.

Patatas fritas de hamburguesería: 280 calorías por cada 100 gramos.

Y, la gran noticia, es que, además es muy barata.