Barcelona-Real Madrid: los números de Zidane contra el búnker del Camp Nou

«Hemos sido mejores sobre todo fuera de casa, en casa nos ha costado más. Aquí el Real Madrid suele jugar bien, suele afrontar los partidos con mucha intensidad y es el Madrid que esperamos esta vez», analiza Ernesto Valverde lo que puede ser el partido de hoy. Es una pequeña paradoja, ya que el técnico azulgrana teme más a su rival en el lugar donde él se siente más seguro. Porque las dudas que ha despertado el equipo durante lo que llevamos de temporada se esfuman en el Camp Nou. El Barça se hace fuerte como local: la última vez que perdió fue en noviembre de 2018, ante el Betis, 3-4, en lo que supuso romper una racha de 42 partidos sin caer en Liga de los catalanes. Esta campaña son siete victorias en siete partidos ante su afición en el campeonato doméstico, y el único tropiezo fue el empate con el Slavia de Praga en la Champions (0-0). La cara B de esta gran marca es la fragilidad defensiva mostrada: sólo el conjunto checo en Europa y el Sevilla en Liga se quedaron sin marcar en el Camp Nou. Inter, Borussia, Betis, Valencia, Villarreal, Valladolid, Celta y Mallorca lograron al menos un gol, pero al final casi todos terminaron goleados.

El último precedente del Real Madrid en el Camp Nou acabó 5-1, pero los dos duelos anteriores en Liga fueron empates. Zidane nunca ha perdido como técnico en el coliseo azulgrana, en cuatro visitas. Esta vez los dos equipos llegan con las fuerzas igualadas, con los mismos puntos, después de sacar uno en la última jornada y con la sensación de ir a más. El Clásico podría marcar un poco la moral del que gane y el que pierda. «Todavía estamos en la primera vuelta. A cualquiera le gustaría ir por delante después del partido, pero aún quedaría mucha Liga», opinó Valverde, que siempre tiende a buscar la mesura, a no exagerar ni en las victorias ni en las derrotas.

El preparador barcelonista parece que ha encontrado por fin un equipo base después de darle muchas vueltas desde el comienzo. Ha cambiado piezas también por las rotaciones, pero nunca como en este momento lo ha tenido tan claro. La presencia de Rakitic en el centro del campo es la pieza que faltaba para acompañar a Busquets y al intocable De Jong. Arthur ha perdido su sitio y, en cualquier caso, está lesionado. Y Arturo Vidal podría tener un papel más de revulsivo. La lesión de Dembélé también hace que el ataque esté claro con el tridente Griezmann, Messi y Luis Suárez, que está ante una de sus grandes pruebas. El francés parece cada vez más metido en la dinámica del grupo.

La única duda de Valverde puede estar en el lateral derecho, porque Semedo ya está recuperado, pero es difícil que Sergi Roberto pierda su sitio ahora que lleva un puñado de buenos partidos. El canterano se está convirtiendo, además, en un especialista en los Clásicos, con seis asistencias en los últimos siete. La lesión de Messi primero y la de Jordi Alba después ha hecho que esta temporada la gran conexión entre ambos todavía no haya dado sus frutos.

Igualados hasta en el Pichichi

Benzema y Messi llegan en plena forma al gran duelo del Camp Nou. Ambos lideran la clasificación del Pichichi, con doce tantos. Hasta en las asistencias tienen números similares: 6 el argentino y 5 el francés.