Selectividad 2025

Malestar generalizado en Galicia por la dificultad de los exámenes de selectividad: “Esto no tiene ni pies ni cabeza”

La nueva PAU en Galicia ha generado una oleada de críticas por parte de docentes y estudiantes, especialmente en las pruebas de Historia de España y Biología

Federico García Lorca, Gabriel García Márquez y Fernando Aramburu, en el inicio de la Selectividad en Cantabria
Malestar generalizado en Galicia por la dificultad de los exámenes de selectividad: “Esto no tiene ni pies ni cabeza”Europa Press

El nuevo modelo de selectividad implantado este año en Galicia no ha comenzado con buen pie. Las pruebas de Historia de España y Biología han desatado las quejas entre profesores y estudiantes por lo que consideran un exceso de complejidad, una falta de claridad y un nivel de exigencia fuera de lugar para el alumnado de segundo de Bachillerato.

Uno de los focos de controversia fue el examen de Historia. En su primer bloque, los alumnos debían analizar y corregir un texto generado por ChatGPT sobre el Imperio Español del siglo XVI, como si trabajasen en el archivo de un ayuntamiento. La tarea, que puntuaba 2,5 puntos, buscaba evaluar la competencia crítica y analítica de los estudiantes.

Sin embargo, varios profesores de la materia han presentado una queja formal ante la Comisión Interuniversitaria de Galicia (CiUG), alegando que el enunciado era confuso y que no se indicaba cuántos errores debían detectarse, a diferencia de lo previsto en el borrador inicial del examen.

Los docentes también denunciaron que la redacción del texto contenía matices impropios del nivel de Bachillerato, como el uso del término “Empresa de Inglaterra”, habitual en contextos universitarios pero ajeno a los libros de texto empleados en la etapa educativa. Esta “falta de claridad”, aseguran, provocó nerviosismo y distracción entre los estudiantes, dificultando el desarrollo del resto del examen.

Pero el mayor aluvión de críticas ha llegado con la prueba de Biología, que ha sido calificada de “imposible”, “desproporcionada” y hasta “propia de una oposición”. Una de las preguntas más polémicas fue la que pedía explicar cómo el uso de ARNm puede facilitar la creación de vacunas adaptadas a los virus con alta tasa de mutación, como el de la gripe. La indignación se multiplicó tanto en las aulas como en las redes sociales, donde estudiantes y docentes denunciaron que el nivel exigido estaba por encima del temario oficial.

“Es un examen bastante complicado para segundo de Bachillerato”, declaró un profesor consultado por Europa Press. “Hay preguntas nada claras y bastante complicadas”, añadió, en línea con las numerosas quejas por la ambigüedad del enunciado.

Una profesora de Biología, visiblemente impactada tras revisar el examen y debatirlo con decenas de colegas del ámbito académico, lo expresó sin rodeos: “Estamos alucinando. Hay una pregunta que ni yo ni otros 40 profesores de Biología sabemos responder. Y era obligatoria”. Según relató, varios estudiantes salieron llorando del aula, completamente desmoralizados. “Esto no tiene ni pies ni cabeza. Si ya es un año complicado por los cambios, este examen ha sido un disparate”, sentenció.

La CiUG, por su parte, ha tratado de restar dramatismo a la polémica, asegurando que los contenidos evaluados estaban dentro del currículo oficial y que estas reacciones se enmarcan dentro de la lógica resistencia a los cambios de modelo.