Los trucos definitivos para conseguir el arroz perfecto sin arrocera

El arroz es uno de los ingredientes más consumidos en todo el mundo, no solo en España. Además de ser asequible, es un producto increíblemente versátil y fácil de preparar. Sin embargo, como con cualquier cosa, la experiencia es clave.

Logrando el arroz perfecto sin una arrocera:

Es muy probable que si eres un entusiasta del arroz blanco, tengas una arrocera en tu hogar que simplifica el proceso. Sin embargo, también puedes obtener resultados similares utilizando una cacerola común si te lo propones. Aquí te explicamos cómo.

La usuaria de TikTok, Cocina con Coqui Fans, ha compartido sus consejos para convertirte en un experto en la preparación de arroz de manera sencilla. Según su explicación, esta receta funciona mejor con arroz redondo y no con arroz largo, como el basmati o el jazmín, los cuales deberás reservar para otra ocasión. Una vez que tengas arroz redondo a tu disposición, es importante que sigas las proporciones adecuadas: un vaso de arroz por un vaso de agua. En cuanto a la cacerola, asegúrate de elegir una que tenga una tapa que encaje bien.

Antes de comenzar a cocinar el arroz, es esencial enjuagarlo cuidadosamente bajo el grifo hasta que el agua salga transparente, lo que garantiza que se haya eliminado el exceso de almidón. Luego, escurrimos el arroz y lo colocamos en la cacerola para cocinarlo.

En cuanto a la temperatura de cocción, comienza con fuego alto hasta que el agua hierva, y luego reduce la intensidad y cubre la cacerola con la tapa. Cocina durante 12 minutos y, después, llega el momento del reposo, un paso que no debes pasar por alto.

El reposo, un paso esencial:

En muchas ocasiones, cometemos el error de interferir con la comida mientras se cocina, pero en esta receta, debemos evitar removerla o destaparla constantemente. Uno de los pasos cruciales es permitir que el arroz repose después de los 12 minutos de cocción. Sin abrir la tapa, dejamos la cacerola reposar durante otros 15 minutos y, antes de servir, removemos el arroz para evitar que se agrupe.