Ernesto Neyra, in extremis, consigue reunir el dinero para intentar salir de la cárcel

Ernesto Neyra habría conseguido el dinero que adeuda por el impago de la pensión de alimentos a su ex mujer, Leli Céspedes, y a través de su abogado, trata de convencer al juez de llegar a un último acuerdo: pagar a cambio de ser puesto en libertad. Una información que nos ha confirmado la propia Leli Céspedes.

Desde que fuera detenido el pasado 9 de agosto en el Hotel On de Matalascañas cuando se encontraba disfrutando de unos días de vacaciones con su novia y su amigo, Antonio David Flores, el bailarín ha tratado por todos los medios de evitar su ingreso en la cárcel para cumplir la condena de 90 días de prisión que le fue impuesta por su reiterado incumplimiento del pago de la pensión de alimentos de los tres hijos que tiene con Leli Céspedes.

Según hemos podido confirmar, el pasado lunes, cuando el bailarín ya se encontraba ingresado en el módulo de cuarentena de la prisión de Huelva, el abogado de Ernesto Neyra se ponía en contacto con la ex mujer del bailarín para comunicarle que “Ernesto ha conseguido que le presten el dinero y estamos tratando de hablar con el juez para ver si pagando, puede salir de la cárcel”.

Y es que, ante la dramática situación que vive el ex marido de Carmen Ordóñez que se encuentra cumpliendo condena en prisión, éste habría conseguido que le prestaran el dinero que adeuda a Leli, nueve mil euros, para intentar, in extremis, un último acuerdo que le posibilite salir en libertad.

El problema al que se enfrenta Neyra para conseguir su objetivo es la poca credibilidad que sus propuestas tienen ante el juez del Juzgado Número 3 de Málaga, después de años de incumplimientos. De hecho, este ha sido el motivo, de que se decretase su ingreso en prisión tal y como reza textualmente el auto al que hemos tenido acceso.

El auto del juez deja claro que entra en prisión por no cumplir sus compromisos de pago

El auto con fecha 23 de septiembre de 2019, el magistrado titular del Juzgado de Instrucción Número 3 de Málaga, razonaba que “Habiendo incumplido Ernesto Neyra Almodóvar, una vez más, el compromiso de satisfacer las responsabilidades civiles en los términos acordados, en la resolución del 9/01/2019, procede según dispone el artículo 80 y siguientes del Código Penal revocar el beneficio de la suspensión de la pena, ordenando el cumplimiento de la misma.”

En esa fecha, hace casi un año, el juez ya disponía “dejar sin efecto los beneficios de la condena condicional otorgados en momento al condenado Ernesto Neyra decretando su ingreso en prisión, en el plazo de DIEZ DÍAS, a fin de que cumpla la pena que le fue impuesta bajo apercebimiento de declararlo en búsqueda y captura”.

A esto se añade que, pese a que debido al Covid 19, agosto no es inhábil y los juzgados están abiertos desde el pasado 11 de agosto, no ha sido posible contactar con el juez por lo que, es posible, que el bailarín vea cómo su esperanza de salir en libertad se retrase, en el mejor de los casos.

El peor escenario, y más probable, para el bailarín sevillano es que el juez, ante los reiterados incumplimientos de Ernesto para satisfacer la deuda con la madre de sus hijos y el hecho de que no ingresara voluntariamente en prisión en febrero, una vez que se desestimaron todos sus recursos, lo que motivó la orden de búsqueda y captura que ha posibilitado su encarcelamiento, deniegue su petición.