La dramática petición de un enfermo terminal a la Reina Letizia

Más allá de su importante labor como esposa del jefe de Estado, la Reina Letizia también desempeña una importante labor humanitaria. Se ha volcado en proyectos solidarios en diferentes campos, aunque en los últimos años se ha centrado en dar visibilidad a las denominadas “enfermedades raras”, aquellas que afectan a un porcentaje muy pequeño de la población. Conociendo su preocupación por estas dolencias, la Asociación Nacional de Hipertensión Pulmonar ha hecho llegar a Su Majestad una dramática misiva en la que le informa de la situación de Ablaye Mboup, un hombre que se encuentra en fase terminal y que no cuenta con familia en España para que le acompañe en su final.

El hombre de origen senegalés reside en Fuengirola desde que llegó a España en busca de nuevas y mejores oportunidades, pero una enfermedad truncó sus expectativas. Se trata de una dolencia que sufren entre 15 o 30 personas por cada millón de habitantes, es degenerativa y no tiene tratamiento. Además, Mboup debe hacer frente a esta crítica situación sin contar con el apoyo de su familia, que continúa en Senegal a la espera de recibir el permiso para viajar a nuestro país.

“Para Ablaye, el impacto de la enfermedad ha sido muy grande, ya que no sólo ha tenido que aceptar y asumir que padece una enfermedad rara y sin cura, sino que, además, no ha tenido el soporte emocional de la familia, en especial de sus hijos, que residen en Senegal”, reza la carta que se ha hecho llegar a la Reina Letizia, tal y como ha recogido “Diario Sur”.

Aunque desde el hospital en el que está recibiendo tratamiento ya han comenzado los trámites para que su familia pueda viajar a España con urgencia y despedirse del paciente, la excesiva burocracia que rodea a estos procesos podría llevar a que se haga demasiado tarde... “Sabemos de la implicación de Su Majestad con las causas humanitarias y la estrecha vinculación con las enfermedades raras, por lo que recurrimos desesperadamente a su apelación como última opción de poder ofrecerle a Ablaye una muerte humanizada al lado de su hijo”, se insiste en la carta.