El diario de Amilibia: Feijóo y su política para adultos

Yo ofrezco una España normal y una política para adultos», anuncia Feijóo. Es una gran idea, un ambicioso anhelo, la pretensión de hacer política para adultos, ya era hora, pero quizá el líder no ha reparado en que para que su política adulta sea exitosa necesita una sociedad adulta. Y ahí llega mi duda: ¿existe en España tal cosa? Para que se diera una sociedad adulta, Feijóo debería priorizar un plan urgente contra la infantilización dominante. Habría que «desenfantilizar» a toda una sociedad Mr. Wonderful y woke a la que aún le podría traumatizar saber que ha muerto la madre de Bambi, que Pinocho acabará tristemente de portavoz del Gobierno y Blancanieves y los Siete Enanitos en el Circo del Solete Sánchez.

Las lenguas viperinas del rojerío han dicho en las redes que se empieza así (con la política adulta) y se termina haciendo cine X, con Nacho Vidal de asesor, obviando que esa función la tienen en exclusiva Irene Montero y Pam, el dúo sexual sin igual. La tolerancia liberal del líder pepero no solo admite en el partido a socialdemócratas y anarcoindividualistas: ahí está el candidato a la alcaldía de Carcelén (Albacete), Antonio Moreno, que empezó haciendo cine X y terminó en el citado pueblo de bombero forestal. Una evolución redonda: de encender fuegos a apagarlos. Ahora también es ganadero de cabras, que tirarán al monte de Venus, imagino.

El politólogo Agustín Laje, autor de «Generación idiota», dice: «El Estado niñera procura evitar la maduración de su ciudadanía y se ocupa solo de su goce». Ahora le cuentan al parvulario nacional que viene las ratas, pero, tranquis, pequeños, que ahí está el Flautista de la Moncloa para salvaros. A ver cómo les quitamos esa ilusión a los niños, Feijóo.