El espejo del alma
Lourdes Montes, postparto fetén y microagujas
Ha proclamado su amor por el Dermapen, esa herramienta de microagujas que promete rejuvenecer la piel y que parece haberle dado vida a su rostro
En la reciente exclusiva de «¡Hola!», la diseñadora y esposa de Fran Rivera, Lourdes Montes, ha desvelado por fin el rostro de su ansiado bebé, un acontecimiento que reafirma su posición en el centro de atención. La revista ya había anunciado su embarazo hace nueve meses, y ahora, en el posparto y rodeada de un ejército de maquilladores, peluqueros y estilistas, Lourdes, que ya tiene cuarenta años de edad, ha aprendido a manejar con acierto el arte de parecer deslumbrante, incluso cuando muchas de nosotras luchamos con lágrimas de sangre por recuperarnos de un parto a esta edad.
Con su mirada discreta y a menudo un tanto cursi, Lourdes después de diseñar por aquí y por acá encontró su lugar como diseñadora de trajes de gitana a través de su marca de moda Miabril. Su viaje desde abogada hasta diseñadora no ha estado libre de críticas; cuando debutó con su traje de novia, las opiniones no fueron del todo favorables. Pero a ella eso no le detiene. La perseverancia es su fuerte, y lo demuestra con un aire de despreocupación que a veces roza la paletería.
Mientras otras se enfrentan a la dura realidad del postparto, Lourdes ha encontrado un modo de reivindicarse; ha compartido en sus redes sociales cómo uno de sus secretos es recurrir al bótox. «Una ayudita aquí y allá nunca viene mal», dice con el mismo desparpajo con el que se pone su vestido de flamenca. Además, ha proclamado su amor por el Dermapen, esa herramienta de microagujas que promete rejuvenecer la piel y que parece haberle dado vida a su rostro. «Los resultados son casi inmediatos», susurra, mientras nos reta a creer que es posible lucir perfecta sin esfuerzo alguno.
Además, no hay que olvidarse de su encantamiento por el tratamiento de IPL, que asegura le da una luminosidad digna de una farola en la Feria de Abril. «Es un láser agradable, no molesta, no duele...», aseguran sus seguidores. Sin embargo, la realidad puede parecer a veces más cercana a lo kitsch que a lo chic.
En un contexto tan desafiante como es el postparto, Lourdes ha buscado la ayuda de una clínica especializada en el cuidado de la salud de la mujer. Aquí se lleva a cabo una fusión de estética y bienestar, combinando sesiones de fisiopilates con revisiones de suelo pélvico, todo enfocado en la recuperación. Después de todo, no se trata solo de lucir bien, sino de sentirse bien en este nuevo capítulo de su vida.