Pilar Rubio bien vale una misa para el converso Sergio Ramos

Al principio, la presentadora no escondía sus dudas sobre su relación con el jugador. Pensaba que tenían poco en común, pero finalmente, siete años y tres hijos después, hoy se casan por la Iglesia.

Los que fueron testigos de los primeros momentos de galanteo entre Sergio Ramos (33) y Pilar Rubio (41), en plena resaca tras la victoria de la Eurocopa de 2012, aseguran a LA RAZÓN que la presentadora tenía sus dudas con respecto a su relación con el capitán del Real Madrid. «Ella pensaba que tenían poco en común y jamás le han impactado los hombres por su fortuna o éxito. Se enamora de las personas», nos confiesan. Sin embargo, el futbolista de Camas (Sevilla) logró despejar los recelos de la de Torrejón. «Sergio venía de un noviazgo complicado con Lara Álvarez y encontró en Pilar todo lo que le gustaba en una mujer. Se esforzó mucho en conquistarla.

Al principio había muchas cosas que les distanciaban, desde sus amistades, gustos musicales, inquietudes intelectuales. Los que les conocemos pensábamos que aquello no iba a tener futuro pero finalmente han formado una pareja de lo más estable y encantadora». Siete años y tres hijos después (Sergio, Marco y Alejandro), el madridista y la presentadora de «El Hormiguero» se darán el «sí» en la catedral de Sevilla ante unos 500 invitados, con los Beckham o Shakira y Piqué como cabezas de cartel, que hoy harán de la capital andaluza una enorme alfombra roja. «Quiero que nuestra boda sea una sorpresa para todos, nos lo hemos currado mucho y va a ser algo muy variado para que pueda disfrutar todo el mundo. Se dicen muchos disparates, estoy deseando que llegue el día para que veáis todo», adelantaba Rubio, cuya despedida de soltera ha sido mediática y en bañador a solo 48 horas de las nupcias. Y con talonario de por medio.

Pilar, que confesó que tanto ella con su futuro marido «estamos bastante tranquilos», ha rentabilizado al máximo su sprint hacia el altar y habría facturado unos 30.000 euros en la inauguración del parque temático Warner Beach (Madrid). Unas horas antes, la madrileña, vestida de rojo pasión, también prestaba su imagen a una conocida marca de coches. El pasado lunes era su prometido el que defendía los colores de La Roja frente a islas Feroe, en su primer partido oficial tras dar calabazas a una supuesta oferta de China para mantener los votos que le unen al Real Madrid, a 12 millones de euros netos por temporada hasta 2022. Con esta boyante actualidad financiera, la pareja se desposa hoy tras haber firmado ante notario la separación de bienes, para mantener así sus millonarios negocios al margen de su historia de amor, según nos confirman fuentes de su entorno. Además, esta opción, frente al régimen de gananciales, ha ganado adeptos en los últimos años, pues preserva el patrimonio familiar ante un imprevisto como el que sufrió recientemente Ramos con la empresa Desarrollos Inmobiliarios Los Berrocales, en la que está asociado junto a su padre, José María.

Esta promotora, con 13 millones y medio de capital y sede en la madrileña calle Serrano, tenía un proyecto para construir 22.000 viviendas en el barrio de Vallecas que fue rectificado por el Ayuntamiento de Manuela Carmena. Según algunas fuentes, el consistorio redujo la edificabilidad y esto supuso la paralización de la obra y unas pérdidas de más de 60 millones de euros. Pese a todo, los negocios del capitán de la Selección, que cuenta con diferentes empresas que van desde el sector inmobiliario hasta una yeguada, están tasados en unos 100 millones. Visto lo visto, es palpable que el amor para esta galáctica pareja, que se está construyendo una mansión de 1.400 metros cuadrados en La Moraleja, está al margen de la contabilidad y con su boda tampoco pretenden hacer caja. Si los ilustres asistentes al enlace quieren tirar de tarjeta, el destino de su donación deberán ser dos asociaciones benéficas, por deseo explícito del tándem Ramos-Rubio.

Se trata de Unicef, una organización con la que tanto el defensa del Madrid como la presentadora colaboran habitualmente, y Piel de Mariposa, una enfermedad muy delicada que impide abrazar a las personas que la sufren. Y si de generosidad hablamos, hay otro gesto dadivoso que ha sorprendido a algunos amigos que acudirán al enlace: el hecho de que Sergio contraiga matrimonio eclesiástico. Sus cercanos confirman a LA RAZÓN que «para nada es de misa diaria ni tiene fuertes convicciones religiosas. Creemos que lo hace por ella». Lo cierto y verdad es que Ramos tuvo que bautizarse el 14 de mayo en la Parroquia Nuestra Señora de La Moraleja, donde llegó en un deportivo y acompañado por dos testigos y su hermano René.

«Porque llenaste mi vida de colores y risas, de complicidad y pasión, de sinceridad y entrega, de familia e ilusión», le dedicaba Ramos a su amada el pasado marzo. Está claro. Para Sergio, Pilar bien vale una misa.