El «aquelarre» etarra

Extorsión mafiosa por Carlos García

La Razón
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Miro la carta que han entregado los amigos de ETA a cada pequeño empresario de Elorrio advirtiéndoles de que pasarán a recoger el dinero para ser anotados en la lista negra como deudor, o en la lista blanca como pagador de una aportación «voluntaria» a la causa de los asesinos encarcelados. Y me viene a la cabeza el nombre de Inaxio Uria, empresario vasco asesinado hace tres años. Y es que nada es casual, y el miedo que ETA genera en la sociedad lo saben bien los grandes y también los pequeños empresarios, y es en ese miedo, esa amenaza, la que les impulsa a reclamar a todos los comercios y empresas de Elorrio dinero para los presos de ETA. Pero ese dinero además, es sólo para los presos que se mantienen en la órbita de ETA. Para los presos arrepentidos no irá el dinero recaudado. Y así me viene el recuerdo de Yoyes, miembro de la banda que renegó del uso de la violencia, que se desmarcó de ETA y que por ello fue asesinada por sus propios compañeros, en concreto por el sanguinario «Kubati», que también es de Elorrio. Y es que estas cartas de pura extorsión significan en Elorrio mucho más que lo que sus palabras reflejan, significan que ETA sigue existiendo, que sigue controlando todo su entramado, y que sigue intentando mantener su presencia infundiendo miedo para sus fines. Por eso exijo que Bildu y Amaiur, y los autodenominados Izquierda Abertzale rechacen esta extorsión mafiosa y sibilina, porque han guardado el peor de los silencios, el silencio cómplice y ni están ni se les espera… ni con Uria, ni con Yoyes, ni con ninguna de sus víctimas, que son quienes no podrán estar estas navidades con sus seres queridos por culpa, precisamente, de esos asesinos presos.

 

Carlos García
Concejal del PP en Elorrio