Antes de que anochezca por Francisco de la Torre Díaz

En junio del año que viene, el común de los ciudadanos estamos obligados a retratarnos ante Hacienda, realizando nuestra declaración del IRPF. Es cierto que, con los avances tecnológicos, la confección es cada vez más cómoda, aunque otro tema es que el pago en sí también lo sea. Conviene tener en cuenta que la «foto» que se refleja en junio de 2011 es la del 31 de diciembre de este año.

Antes de que caiga el telón de 2010, piense si no le conviene aportar a una cuenta ahorro-vivienda, en la última oportunidad, por el momento, de aprovechar la deducción vigente (aunque sólo por las aportaciones de este año), o realizar aportaciones para su plan de pensiones. También puede ser un buen momento para apoyar a una ONG o a una fundación. Si no lo hace ahora, las ventajas fiscales quedarán para 2012.

Más allá de estas actuaciones puramente financieras, la actuación fiscalmente más ventajosa para el contribuyente es adquirir su vivienda habitual antes de que anochezca y den las uvas el próximo día 31 de diciembre. De esta forma, usted podrá aprovechar la deducción vigente durante los próximos años.

Sin embargo, tomar este tipo de decisiones importantes y complejas sólo por motivos fiscales no es una buena idea. No sólo es poco recomendable por las obvias razones de que nos podemos equivocar de vivienda, sino porque nada garantiza que en los próximos años no se reimplante la deducción por la compra o, incluso en sentido contrario, se reduzcan las deducciones que quedan transitoriamente vigentes.

En estos tiempos turbulentos, la recomendación a cualquier ciudadano es que intente aprovechar las ventajas fiscales actuales, si tiene una decisión tomada. Pero no haga por puras razones fiscales lo que no hubiese hecho de todas formas. No merece la pena. Felices fiestas y suerte en 2011.

Francisco de la Torre Díaz.
Portavoz de la Organización de Inspectores de Hacienda