Francia

Un directivo del CNI objetivo de ETA tras aparecer su foto en un periódico

Karrera guardaba imágenes de destacados mandos de las Fuerzas Armadas

El cabecilla del «aparato militar», Mikel Karrera Sarobe
El cabecilla del «aparato militar», Mikel Karrera Sarobelarazon

MADRID- El cabecilla del llamado «aparato militar» de ETA, Mikel Karrera Sarobe, «Ata», detenido el pasado día 20 en Bayona, tenía, entre los documentos que se le incautaron, fotografías de varios generales del Ejército; del Director de Apoyo Operativo (DAO) de la Guardia Civil, Faustino Cardiel, y de un directivo del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Luis Jiménez, experto en seguridad electrónica.Según fuentes antiterroristas consultadas por LA RAZÓN, el mero hecho de que «Ata» hubiera bajado de internet las noticias y fotografías de estas personas supone que eran objetivos potenciales de la banda criminal. Como dijo el ministro del Interior, Karrera y los otros dos arrestados, Arkaitz Aguirregabiria y Maite Aranalde, no estaban, precisamente, «rezando el rosario», sino planificando atentados.Al dirigente etarra se le ocuparon 50 dispositivos de almacenamiento del tipo pen-drive, en su mayoría encriptados con un nuevo sistema que hace muy complicado acceder al contenido salvo que se disponga de las claves establecidas. Los archivos están escondidos detrás de fotografías, protegidos por códigos alfanuméricos del tipo True Crypt.Sin embargo, los expertos franceses han logrado acceder a varios de ellos en los que se guardaban reportajes periodísticos con las citadas fotografías y cartas de tipo personal de etarras dirigidas a sus familiares. Cuando están en la clandestinidad en Francia, los miembros de la banda no pueden ponerse en contacto con los suyos por razones de seguridad. Cualquier comunicación debe encauzarse a través de la «dirección» que, según su criterio y en función de lo que digan las misivas, se la hacen llegar, o no, a sus destinatarios a través de «correos» (individuos que realizan esta misión) de la propia organización criminal. Del contenido de las cartas no se puede deducir, según las citadas fuentes, que ETA tenga previsto abandonar las armas o dejar de cometer atentados en los próximos meses. Todo lo contrario. Las frases son contundentes y no dejan lugar a dudas. Al menos, esto es lo que la banda ha hecho llegar a sus militantes.Luis Jiménez es uno de los pocos directivos del CNI cuya imagen ha aparecido en los medios de comunicación. Al cabecilla «Ata» no le pasó inadvertida una ocasión tan interesante como inesperada y lo guardó en su archivo. Por lo que respecta a los mandos de las Fuerzas Armadas, estaban los más destacados, entre ellos el propio JEMAD, Julio Rodríguez, y el jefe de la Brigada de la Legión.