Museos

El Thyssen de Málaga zanja su crisis con la elección de Lourdes Moreno

El Patronato de la Fundación Palacio de Villalón, que rige el Museo Carmen Thyssen-Bornemisza de Málaga, acordó ayer el nombramiento de la actual directora de la Fundación Picasso-Museo Casa Natal, Lourdes Moreno, como nueva directora artística de la pinacoteca tras la renuncia de María López, que dimitió del cargo el pasado lunes junto al miembro del Patronato Tomás Llorens.

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En una reunión extraordinaria, el Patronato aprobó que el procedimiento de elección sea la designación de la persona que quedó en segundo lugar en el proceso en el que la anterior responsable obtuvo la mayor calificación. Así, Moreno, que lleva veintidós años trabajando en diferentes responsabilidades en la Fundación Casa-Natal Picasso, tomará posesión del cargo en el plazo máximo de un mes; hasta entonces, la actual jefa de Registro, Verónica Castillo, ejercerá el cargo en funciones.

La baronesa Carmen Thyssen Bornemizza propietaria de la colección que alberga el centro museístico, expresó ayer su «alegría» ante el hecho de que la nueva responsable sea malagueña, y defendió la estructura bicéfala del museo, con una dirección artística y una gerencia, que ocupa Javier Ferrer, «como tienen el Thyssen de Madrid y el Museo Picasso Málaga», y circunstancia que motivó la renuncia López y Llorens.

En la misma línea, el alcalde de Málaga y vicepresidente de la Fundación, Francisco de la Torre, subrayó la «normalidad» que reina en la pinacoteca pese a las recientes dimisiones para significar que «la ambición del museo no baja y se trasladará en hechos concretos a lo largo de las exposiciones temporales y con el préstamo por 15 años de la colección permanente».

De Braque a Feito
En la reunión de ayer, la Fundación Palacio de Villalón aprobó también el contrato de préstamo durante 15 años, ampliables, de la colección de la baronesa Carmen Thyssen integrada por un total de 267 obras.

El contrato para el préstamo de los cuadros habrá de ser ahora aprobado por la junta de gobierno local del Ayuntamiento de la capital malacitana. A principios de junio, entre el 6 y el 7, se inaugurará la primera de las exposiciones temporales –inicialmente prevista para el mes en curso–, que albergará el museo y que mostrará 50 obras de la colección privada, de la baronesa, que están ahora en préstamo en el Thyssen de Madrid.

A través de esta muestra se repasará el arte de finales del siglo XIX y principios del XX, con autores españoles e internacionales, tales como Braque, Matisse, Casas, Rusiñol, Nonell, Canals, Anglada Camarasa, Luis Feito, Giorgio Morandi, Tàpies, Miró, Saura, Juan Gris, Torres García, Francisco Bores o Picasso.

Tomás Llorens, una actitud «poco elegante y profesional»
La baronesa Thyssen tuvo ayer duras críticas para con el dimitido patrono de la Fundación, Tomás Llorens (en la imagen), a quien reprochó que hubiera tenido el «mal gusto» de entregar «a la Prensa» su carta de dimisión, misiva en la que expresó su disconformidad con el nombramiento de un gerente.

En una rueda de prensa en la que rememoró su «larga» relación profesional con Llorens, a quien conoció cuando éste pidió a ella y a su marido «venir a trabajar al Thyssen de Madrid en 1992 como director artístico», consideró que su salida de la pinacoteca «es un bien para el Museo Thyssen de Málaga».

En este sentido, adujo que «en la vida siempre me ha gustado llevar las cosas muy claras y bien hechas para evitar problemas y si ha habido problemas es porque Llorens no me hizo caso en que la persona elegida fuera de Málaga y que hubiera un director gerente». Además, confirmó su firme intención de dejar de trabajar en el futuro con Llorens en otros proyectos al sentirse «ofendida» y «molesta» con su actitud, que calificó como «poco elegante, poco seria y poco profesional».

Pese a la doble dimisión, quiso dejar claro que «no hay crisis» en una pinacoteca de la que dijo «se ha llevado de maravilla y tenemos unas bases muy fuertes para seguir». La baronesa defendió su idea de la estructura bicéfala del museo, con una dirección artística y una gerencia. Insistió a su vez en que en el museo de Madrid y el Picasso de Málaga funcionan con esta fórmula, ya que «un museo es como una empresa».