Champions League

Lyon

Benzema en caída libre

Desde su marcha del Lyon, ha tenido problemas con Pellegrini, «Mou» y Domenech. Ha desaprovechado las tres titularidades de este año

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MADRID- Lo que Mourinho ha conseguido con Marcelo («Ha mejorado mi motivación y agresividad», contaba con orgullo ayer el lateral brasileño) e Higuaín (De él dice el técnico que «trabaja como nunca», que ha visto mucho al Real Madrid en años anteriores y a este nivel no había visto «nunca» al «Pipita»), no lo está consiguiendo con Benzema. Y los dos citados han pasado por un calvario para la aceptación de la parroquia madridista igual o mayor que la del francés, pues más tiempo llevan en sus filas. Marcelo, por ejemplo, recién se ha quitado de encima el sambenito de que no es un jugador válido para el Madrid. E, incluso, Higuaín todavía pelea para acabar con el reproche de que falla en las grandes citas. Ambos no se rinden. Sin embargo, el delantero francés no da esa sensación.

Su declaración de intenciones en pretemporada –(«Este año sí voy a triunfar»), el que por fin comenzaba a hablar castellano y contando, además, con el poder de motivación de Mourinho, por las buenas o por las malas, hacía presagiar una temporada muy distinta a la de su debut en España. No ha sido así. Benzema sigue en caída libre y cada oportunidad que Mourinho le ha brindado la ha desaprovechado. Tres titularidades (una en Liga –jornada 2–, otra en Liga de Campeones –jornada 2– y, la última, el martes, en el debut de Copa del Rey), tres actuaciones ocres sin gol.

Desde su llegada al Real Madrid, Benzema no ha conseguido alcanzar el nivel que esperaban de él tanto Pellegrini, como Domenech y, ahora, Mourinho. Con los tres ha tenido problemas. Además, los dos altercados automovilísticos que sufrió la pasada temporada y su presunta implicación, junto a Ribery, en un escándalo de proxenetismo no ha favorecido su imagen. Como tampoco, su extrema introversión no sólo de cara al público sino con sus propios compañeros ha obrado en contra de su adaptación al Madrid y a la Liga.

Lo cierto, es que, a día de hoy, su mejor salvoconducto es que Florentino lo fichó personalmente. Sí, el presidente madridista se desplazó a su domicilio cerrar el acuerdo. Fichaba entonces Florentino Pérez a la gran estrella del fútbol francés, máximo goleador en 2008 e internacional absoluto con sólo 19 años. Una inversión de futuro de 35 millones de euros de coste, que comienza muy seriamente a provocar dudas entre la propia directiva madridista. De él, empieza a pensarse que no tiene valía para un grande. Sí para un Olympique de Lyon, donde el equipo gira en torno a él y no es una estrella más.

A su bajo rendimiento se le ha encontrado justificación por el pertinente proceso de adaptación –futbolístico y personal–, a su carácter y juventud, pero comienza a vislumbrarse un problema de actitud y motivación. Mourinho ya le ha dado varios toques en público (el único con el que ha tenido necesidad, además de Pedro León, que sólo fue uno). El primero: «¿Qué pasa contigo? El año pasado no eras tú, era tu primo el que jugaba en el Madrid. Si fuera por ti, tendría que entrenar a las 12 porque a las 10 llegas dormido y a las 11 sigues durmiendo». El segundo: «Espero que entienda lo que tiene que hacer para jugar más. Desde el banquillo se ve muy bien el partido y, como es inteligente, tarde o temprano lo va a entender». Y tercero: «A ver si en Murcia me demuestra que merece más». Y Benzema parecía haberlo entendido. «Lo que me pide Mourinho es que corra más y voy a hacerlo», anunció, pero sus actos fueron otros en La Condomina.


Florentino y Zidane, con Mourinho
Fue una reflexión en voz alta, aunque nada de lo que dice Mourinho está exento de intención, que Zidane, hasta ahora asesor presidencial, «estuviera más cerca del cuerpo técnico que del presidente». O lo que es lo mismo, a «Mou» le parece que «Zizou» es más útil al ras del césped. En el club recogieron el guante y días despues, Zidane afirmó: «Voy a ser el vínculo entre el primer equipo y el presidente». A partir de ayer, es poder de facto. El francés y Florentino Pérez se trasladaron a Valdebebas para reunirse con Mourinho y trazar las líneas maestras de esta relación. Quizá Zidane pueda ayudar a Mourinho con Benzema.